"La pintura del siglo XIX ha venido siendo un tanto desdeñada, cuando no descalificada, con juicios de carácter global ciertamente peyorativos: amanerada, rancia, anticuada, etc. Y sin embargo, bien contemplada y enjuiciada, valorada en su justa y ajustada medida, apreciando en toda su amplitud la riqueza de ideas, actitudes y realizaciones que esas obras nos transmiten, consideramos que tales juicios pueden ser sensiblemente modificados". 

Frente a esas acusaciones, Julio Martínez Calzón se ha propuesto destacar el carácter fecundo e íntimo del arte de este siglo, su intensidad creativa y el llamado 'espíritu del XIX'. Ese es el objetivo de  'La pintura del siglo XIX. Una visión estético-conceptual' (Villaverde Editores), dos volúmenes que reúnen la historia de la pintura de esta centuria dividida por países y movimientos dando lugar a una extensa enciclopedia que recoge, a través de 1.500 ilustraciones, la obra de más de 1.200 pintores.

Aunque a primera vista pueda parecer un tratado aséptico, este libro persigue suscitar, en palabras de su autor, "una nueva percepción de la obra pictórica llevada a cabo en el mundo occidental a lo largo del siglo XIX". Pero lo más importante es que persigue dar su justo reconocimiento al arte que durante años ha sido injustamente despreciado y que, posando su mirada en lo natural y lo histórico, ha legado nombres a la historia del arte como Ingres, Corot, Courbet, Cezanne, Müller, von Stuck, Turner, Goya, Zuloaga, Sorolla, Casas y Carbó, Costa, Remington, Duveneck, Davis o Henri.