Citroën C5 AirCross, el todocamino más confortable
La apuesta de Citroën por el confort es ya una tradición. Los que hemos podido conducir o viajar en vehículos como los GS, BX, CX, XM
Es un buen todocamino, con posibilidades de uso fuera del asfalto, pero no ofrece ni como opción la tracción 4x4.
El C5 AirCross incluye el cuadro digital configurable con hasta cinco opciones para ver los datos del viaje y de los sistemas del vehículo.
Tiene lo necesario para poder pensar en las aventuras los fines de semana. Un buen maletero, buena altura al suelo y el grip control para salir de situaciones apuradas.
La gran nocvedad en este modelo es la combinación del cambio automático de ocho marchas con el motor pequeño de gasolina, de tres cilindros, y 130 CV.
Por sus dimensiones y su motor se mueve bien en todos los terrenos, en autopista, carreteras de segundo orden, pistas y hasta en ciudad con esta versión con el cambio automático.
Los asientos parecen demasiado blandos, pero son cómodos y permiten hacer muchas horas sentado sin demasiados problemas.
El espacio para las pierras en las plazas traseras es algo justo, pero muy razonable en un vehículo de 4,50 metros de longitud. La sensación de espacio es buena.
La imagen es muy diferente a la del resto de modelos todocamino compactos. Las llantas de 19 pulgadas le sientan bien estéticamente pero para rodar por carreteras con mal firme, mejor de 17 o 18".
Un maletero muy bueno, con 580 litros, que resulta no solo profundo en longitud sino también en altura. Debajo del suelo tiene varios huecos para llevar cosas sin moverse demasiado.
Un vehículo diferente, llamativo, con personalidad, que solo tiene 4,50 metros de longitud pero que está muy bien aprovechado en su interior y su maletero.
La apuesta de Citroën por el confort es ya una tradición. Los que hemos podido conducir o viajar en vehículos como los GS, BX, CX, XM o Xantia sabemos que la apuesta por el confort y la suavidad de marcha es algo obligado en cualquier modelo de Citroën. Además, este C5 Aircross aporta unas buenas posibilidades de uso fuera del asfalto, al menos sobre pistas. Altura al suelo de 23 cm, control de descenso y un sistema "grip control" que es un paso intermedio entre la tracción delantera y las cuatro ruedas motrices, pero más barato y sencillo.
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