¿Cómo nos afecta dormir por la noche con calor y cómo remediarlo?

Por el día, las altas temperaturas nos alegran la mañana y nos dan ganas de salir a tomar algo con nuestros amigos y no volver a casa hasta que se haga de noche. Sin embargo, si aguantan hasta estas horas, una de las consecuencias negativas que puede provocar es que no durmamos como es debido, dando lugar a cansancio, fatiga y otros malestares que afectan a nuestro cuerpo.

No hace falta volver a destacar la importancia de una buena rutina de noche y las debidas horas que hay que dormir, pero sí conocer cuáles son las desventajas de no combatir el calor mientras dormimos, sobre todo ahora que falta poco para que llegue el verano, y el termómetro, cada día más, empieza a subir de temperatura.

El aumento de las temperaturas en el ambiente influye en nuestros ritmos del sueño. Tal y como explican los expertos del Hospital Universitari General de Catalunya, "a medida que aumenta la temperatura ambiente, la duración de los ciclos del sueño se acorta. Además, una mayor temperatura corporal hace que el cerebro genere menos melatonina, la hormona que segrega el cuerpo humano y que actúa como reguladora y precursora del sueño, fundamental para dormir bien”.

En cuando a consecuencias físicas, desde la página web de la marca Care+ destacan algunas como garganta seca, acaloramiento y enrojecimiento del rostro, y psicológicas como sensación de agobio o nerviosismo y ahogo o dificultad a la hora de respirar. Exacto, tu cuerpo, tanto por dentro como por fuera, es la víctima principal cuando vamos a la cama y el calor se convierte en nuestro enemigo principal a la hora de conciliar el sueño.

¿Cómo remediarlo?

Los remedios más eficaces no son tan difíciles como puedes pensar. Solo hay que seguirlos a rajatabla y empezar a practicarlos ahora para estar listos de aquí a final de verano. Uno de los primeros es el uso de prendas con tejidos naturales como el algodón. Aunque parezca algo básico, la razón principal es que el algodón, por ejemplo, ayuda a que la piel transpire mejor. Puedes usar tanto pijamas como juegos de sábanas elaborados con este material.

Otro de los remedios más repetidos y aconsejados es el de ducharse antes de dormir, preferiblemente si el agua está templada, ni muy fría ni muy caliente. Desde la página web de Alquilea recomiendan esto, ya que "el agua caliente da más calor y con el agua fría el cuerpo intenta aumentar su temperatura".

Lo siguiente tiene que ver con el agua. Aunque parezca algo obvio, la importancia de beber la cantidad de agua adecuada durante la jornada y estar bien hidratados tiene sus ventajas a la hora combatir el calor por la noche. Un consejo que también recomiendan los expertos del Hospital Universitari General de Catalunya. El calor provoca deshidratación y el agua es la principal herramienta para paliarlo.

Por último, tomarse alguna infusión que te facilite el sueño antes de dormir es un remedio natural y eficaz. Puedes optar por una tila o por alguna de estas bebidas que te recomendamos en su momento y que, también, ayudan a perder peso.