Así es la casa de Vicente Aleixandre donde recibió a García Lorca o Miguel Hernández y que se subasta

El hogar de Vicente Aleixandre fue lugar de encuentro de poetas y escritores de la época, pero también fue mucho más, pues entre estas cuatro paredes, el premio Nobel de Literatura (concedido en 1977) ideó la mayor parte de su obra, y allí recibió los primeros ejemplares de ‘Ámbito’, que supuso su debut. Ahora Velintonia, nombre que recibe la casa por ser el que anteriormente tenía la calle en la que está ubicada esta vivienda situada en el madrileño barrio de Chamberí, saldrá a subasta pública.

Este barrio, en el que celebrities como Elsa Pataky y Chris Hemsworth han invertido y donde se mudó de alquiler Díaz Ayuso tras ganar las elecciones, es uno de los más conocidos de Madrid. Además, cuenta con algunos puntos de interés cultural, como el Museo Sorolla, creado en la casa del propio artista y que puede visitarse, conserva el ambiente original y el taller del pintor, y es un ejemplo de una de las opciones que se barajaban para Velintonia.

Desde la Asociación de Amigos de Vicente Aleixandre siempre han defendido la necesidad de conservar este espacio, pues lo que el artista vivió entre estas cuatro paredes forma parte de su propia historia. Aquí Federico García Lorca tocaba el piano, en ella Aleixandre escuchó los ‘Sonetos de amor oscuro’, los que se publicaron y los que se perdieron, y por esta casa pasaron algunas de las figuras más relevantes de la generación de 27, así como otros literatos de la época, como Miguel Hernández. Esta casa, convertida en un refugio para el artista, quedó deshabitada en 1986, dos años después de la muerte del poeta, al fallecer su hermana Concepción.

Esta propuesta lleva años sobre la mesa y ha sido secundada por numerosos nombres de la cultura, desde cantantes, como el cantaor Miguel Poveda, a escritores, que ven en ella una posibilidad de proteger el legado del poeta. "No es solo pasado lo que perdemos si perdemos Velintonia. Es la posibilidad de un futuro en el que no nos avergoncemos de ser. Es memoria, dignidad, esperanza lo que perdemos si la perdemos", decía el escritor y dramaturgo Alberto Conejero, tal y como recoge la web de la asociación.

Finalmente, no ha sido expropiada para crear una Casa de la Poesía, como defendía la asociación; de hecho, saldrá a subasta pública y será vendida siempre que se cubra el precio de salida, que está estimado en unos 4,7 millones de euros, tal y como se concreta en Idealista, donde informan de la venta del inmueble. Por su relevancia y su interés cultural, la Consejería de Cultura de la Comunidad de Madrid la ha declarado Bien de Interés Patrimonial (BIP), una decisión que parece no terminar de satisfacer a nadie por lo que ello implica.

Quienes apostaban por conservar el espacio tal y como se encuentra y convertirlo en un homenaje a la vida y obra del nobel ven como sus esperanzas se desdibujan, pues la vivienda puede ser vendida a un particular, que hará con ella lo que considere oportuno, pudiendo cambiar parte de la estructura de la misma. Como no puede modificarlo todo y hay zonas que hay que respetar por ser considerado BIP, como la fachada o algunas salas en el interior, podría ser una traba a la hora de venderlo, lo que iría en detrimento de las ganancias de los herederos. La sobrina nieta del poeta, Amaya Aleixandre, siempre tuvo la ilusión de poder llegar a un acuerdo con las administraciones públicas, pero parece que esto no ha sido posible.

La casa, cercana al metro que ahora lleva el nombre de Vicente Aleixandre -y que anteriormente se llamaba Metropolitano-, es una vivienda unifamiliar, de tres pisos y 630 metros cuadrados. Tal y como se recoge en la web de compraventa de inmuebles, el desnivel del terreno hace que una de las plantas se convierta en una suerte de semisótano con salida directa a la parte trasera, que es un jardín en el se encuentra el cedro del Líbano, un árbol de gran valor y que está protegido, que fue plantado por el escritor en 1940.

Cuenta con seis habitaciones, dos baños, el jardín ya mencionado y trastero. Informan de que la estructura es metálica, mientras que las fachadas son de ladrillo macizo; la cubierta, inclinada a cuatro aguas, es de estructura de madera. Una casa que marcó la vida de Aleixandre, pues pasó mucho tiempo en ella a causa de su frágil salud.

“En esta casa vivo yo desde el año 1927", explicaba Aleixandre, unas palabras recogidas en el programa especial 'Por tres razones'. "Siempre digo yo, como un recuerdo querido, que a esta casa vine yo siendo un poeta inédito. Después, en ella he ido haciendo las cosas de mi vida a través de los sucesivos años, que son ya cerca de 40".

"En cuanto al trabajo, al modo de trabajar, antes les decía a ustedes que esta biblioteca mía es el sitio donde yo leo, pero no el sitio donde yo escribo", continuaba revelando el poeta. "Porque por el azar de una grave enfermedad muy larga que padecí en mi juventud, yo en mi deseo de escribir y obligado a un larguísimo reposo de años tuve que empezar a escribir tendido en la cama. Entonces, tomé el hábito de trabajar acostado y hoy puedo decir que todos mis libros, todos los que yo estoy en mi vida, se han escrito en la cama”.

Una casa llena de historia que ahora está a la venta, como ha pasado con otros nobles inmuebles como el de la condesa de Romanones. El que fuera el hogar de uno de los poetas más importantes de su época -y de muchas posteriores- está cargado de recuerdos y parece que pronto emprenderá una nueva aventura.