Mel Gibson a los 65: del éxito en Hollywood a la homofobia y el antisemitismo

En 2016 recibió una larga ovación en pie de 10 minutos en el Festival de Cine de Venecia, donde estrenó 'Hasta el último hombre', una película que le sirvió para obtener hasta seis nominaciones al Oscar, incluyendo un guiño a su labor como director de la cinta. Este exitoso drama ambientado en la Segunda Guerra Mundial era la primera película que Mel Gibson dirigía en más de una década.

Ese mismo año, Gibson asistía a los Globos de Oro, donde el presentador de la gala Ricky Gervais no dejó escapar la oportunidad de lanzarle un dardo diciendo: "Lo único bueno que puedo decir de él es que preferiría tomarme una copa con Mel antes que con Bill Cosby", en referencia a las docenas de acusaciones por violación que terminaron con el cómico en prisión.

El paréntesis laboral del actor fue debido en gran parte a que había sido prácticamente excluido de Hollywood, una expulsión provocada a raíz de su arresto por conducir bajo los efectos del alcohol en Malibú en 2006, durante el cual desató además un ataque antisemita. A ello siguieron unas grabaciones filtradas en 2010 en las que Gibson gritaba comentarios xenófobos, incluso usando una palabra racista de Estados Unidos ('nigger', en referencia a una persona afroamericana), a su novia de entonces, la pianista rusa Oksana Grigorieva, madre de uno de sus nueve hijos.

Tras haberle roto dos dientes durante un forcejeo en el que ella sostenía a la hija recién nacida de ambos en brazos, a Gibson se le oye decir: "Te lo merecías. Si te violase una manada de negros, te lo merecerías. Voy a ir allí, y voy a prender fuego a la casa, pero primero me la vas a chupar", se despedía de forma violenta. Más tarde alegaría en su defensa que su mensaje estaba "sacado de contexto".

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Este mismo año, Winona Ryder habló de un momento en los años 90 en el que recuerda que Gibson hizo comentarios antisemitas, homófobos y con referencias al Holocausto, que el protagonista de 'Arma letal' negó con vehemencia posteriormente, llamándola mentirosa. No era la primera vez que Ryder hablaba del supuesto incidente, que salió por primera vez a la luz en una entrevista para una revista hace más de una década, pero con sus recientes comentarios, el público recordó el historial de mala conducta de Gibson.

Pero pese a todo, en plena era de la cultura de la cancelación, cuando un desliz puede acabar con una carrera, el que fuera declarado 'hombre vivo más sexy del mundo' en 1985 por la revista 'People' ha logrado sobrevivir, a pesar de las acusaciones sobre insultar y denigrar a los homosexuales, afroamericanos y judíos en varias ocasiones.

Porque, a pesar de todo, su talento es innegable: es uno de los pocos actores que pueden pasar sin esfuerzo de protagonizar épicas históricas como 'Braveheart' a películas de acción como 'Mad Max' e incluso salir airoso de comedias románticas como '¿En qué piensan las mujeres?', además de ser un realizador ganador de un Oscar y haber sido capaz de recaudar 600 millones con su polémica película 'La Pasión de Cristo'.

"Si eres Mel Gibson, eres un chico malo", dice en 'Variety' el prestigioso gestor de crisis de Hollywood Howard Bragman para explicar por qué pese a todo el neoyorquino sigue, y con éxito, en el negocio del cine. "Ahora bien, si Tom Hanks dijera una de esas cosas, sería asombroso. Pero con Mel Gibson... estamos acostumbrados".