Meghan Markle estrena su pódcast narrando el incendio al que se enfrentó Archie

Meghan Markle ha estrenado su propio pódcast, 'Archetypes', una creación para Spotify en la que la duquesa de Sussex ha contado con la participación de su gran amiga Serena Williams. La exactriz y la tenista mantienen una larga conversación, en la que hablan de muchos temas, empezando por el doble sentido que tiene la palabra 'ambiciosa'. De hecho, este primer capítulo lleva por nombre 'The Misconception of Ambition' ('El concepto erróneo de la ambición').

"No recuerdo haber sentido nunca personalmente la connotación negativa detrás de la palabra 'ambiciosa' hasta que comencé a salir con mi ahora marido. Aparentemente la ambición es algo terrible, terrible, para una mujer. Como he sentido la negatividad detrás de esto, es muy difícil dejar de sentirlo. Tampoco puedo dejar de verlo en los millones de niñas y mujeres que se hacen más pequeñas, mucho más pequeñas, con regularidad. Así que quería hablar con alguien que encarna el espíritu de la ambición, para ver cómo piensa sobre la palabra y la connotación, y cómo las otras muchas etiquetas que afectan a todas las mujeres también le han afectado a ella". Esa persona es Serena Williams.

Más allá de sus quejas por las críticas que recibe, hay un estremecedor y desconocido hasta ahora episodio que Meghan narra y que tiene como protagonista a su hijo. Hablando sobre lo que significa estar delante de una cámara, la duquesa de Sussex asegura que muchas veces la gente juzga sin saber qué pasa en tu vida privada. Y saca a relucir un acontecimiento que tuvo lugar en Sudáfrica, durante el viaje que hicieron en octubre de 2019 en representación de la reina Isabel II. Unos hechos que dejan con la boca abierta a Serena, quien asegura no conocer nada. "Oh Dios mío, no me creo que no hayamos hablado antes de esto", le dice Meghan.

Según la duquesa, después de aterrizar en Sudáfrica, Harry y ella se fueron a un acto oficial. Archie, por su parte, fue trasladado a la residencia que la Corona les había buscado con la nanny, Lauren, a la que Meghan califica de "buenísima". La nanny subió con Archie a su habitación para ponerlo en la cunita, cuando decidió bajar a por un tentempié. Entonces, y como cuenta la duquesa, su instinto le dijo que tenía que llevárselo con ella. Justo en el momento en el que estaba abajo con Archie, un calentador que había en la estancia del pequeño se encendió. "No había detector de humos. Se supone que él debería estar durmiendo allí", cuenta Meghan aterrada.

En esos momentos, Harry y ella se encontraban en Nyanga: "Es el momento en el que estoy dando un discurso a mujeres y niñas. Terminamos el compromiso, nos subimos al coche y nos dicen que ha habido un incendio en la casa. ¿Qué? Ha habido un incendio en la habitación del niño. ¿Qué? [...] Cuando volvimos todo el mundo estaba llorando, todo el mundo estaba conmocionado. ¿Y qué teníamos que hacer? ¿Salir y hacer otro compromiso oficial? Dije: 'Esto no tiene ningún sentido'. Yo estaba como '¿podemos decirle a la gente lo que pasó?". Según la duquesa, los miembros de la Corona les obligaron a seguir con la agenda, sin poder ni siquiera explicar lo que acababan de pasar como padres.