Es noticia
Menú
La princesa Leonor y la infanta Sofía, muy esperadas, visitan a su abuelo Juan Carlos
  1. Casas Reales
EVOLUCIONA FAVORABLEMENTE

La princesa Leonor y la infanta Sofía, muy esperadas, visitan a su abuelo Juan Carlos

Desde su ingreso el pasado viernes para ser intervenido del corazón, la atención informativa ha estado centrada en la salud del emérito y en las visitas de sus familiares

Foto: Felipe y Letizia, con sus hijas, a su llegada al hospital. (EFE)
Felipe y Letizia, con sus hijas, a su llegada al hospital. (EFE)

Había una gran expectación por la visita a su abuelo de la princesa Leonor y la infanta Sofía, a quienes no veíamos en público desde las vacaciones familiares en Marivent, antes de marcharse a un destino privado, como cada año, que en esta ocasión no ha conseguido desvelarse. Ya ha llegado ese momento, una vez que el Rey emérito había abandonado la UCI para ser trasladado a planta.

Los Reyes llegaban al hospital sobre las seis y media de la tarde, en un coche conducido por el propio Felipe VI, unos veinte minutos después de que se hubiera marchado la infanta Cristina, quien visitaba por segunda vez a su padre en 24 horas, pero que permanecía en la Quirón tan solo unos minutos, lo que evitó que coincidiera con su madre, con su hermana Elena y con sus sobrinos Froilán y Victoria Federica, que se habían quedado unas cuatro horas aproximadamente, lo que evidenciaba lo que el parte médico de las 12:00 del mediodía afirmaba: que el Rey sigue evolucionando muy favorablemente.

placeholder El rey Felipe, con su hija Leonor. (EFE)
El rey Felipe, con su hija Leonor. (EFE)

En la otra hospitalización de su abuelo

Las hijas de los reyes Felipe y Letizia habían acudido al hospital en la anterior operación pública del rey Juan Carlos (recordemos que fue intervenido de unas lesiones cutáneas, pero trascendió posteriormente cuando se le vio con unos moratones y unos apósitos en la Feria de San Isidro de Madrid), el 7 de abril de 2018, cuando le sustituyeron una prótesis de rodilla que le habían implantado siete años antes en el Hospital Universitario de La Moraleja. Un momento que será muy recordado pues la reina Letizia abría el coche a su suegra a su llegada al hospital en un gesto que algunos consideraron como una petición de perdón implícita por el rifirrafe sucedido en la catedral de Palma tras la misa de Pascua.

Desde que el rey Juan Carlos fuera operado el pasado sábado para implantarle un triple bypass, se generaron dos focos informativos prioritarios. El primero era la evolución de salud del monarca, que ha sido muy favorable desde el primer momento, como han ido evidenciando los suscesivos partes médicos y los acontecimientos. Y el segundo, las visitas que iría recibiendo en el hospital, pues serviría también para determinar el termómetro de las relaciones familiares.

La infanta Elena siempre ha estado, como decimos, muy vinculada y pendiente de su padre, a quien veía este verano triunfar en las regatas de Sanxenxo, acompañada también por su madre. En esta ocasión, ambos competían con distintas embarcaciones, el rey a bordo del Bribón 500 y su hija en el Erica, que quedó en segunda posición.

El Rey llegaba al hospital el viernes para ingresar y a la mañana siguiente, el sábado, la reina Sofía y el rey Felipe VI le visitaban en la Quirón. Madre e hijo volverían al hospital el domingo y el monarca desvelaba, por la tarde, acompañado por su mujer, la reina Letizia, que cuando se dieran las circunstancias adecuadas, todos acabarían visitando al Rey y que sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, también lo harían cuando llegara el momento adecuado. O lo que es lo mismo, cuando el Rey emérito abandonara la UCI y fuera trasladado a planta, que es algo que se avanzaba este lunes, cuando se afirmaba que se produciría en las siguientes horas.

placeholder La infanta Cristina, en su segunda visita a su padre. (EFE)
La infanta Cristina, en su segunda visita a su padre. (EFE)

Las otras visitas más esperadas

Precisamente este lunes se producía una de las visitas más esperadas, la de la infanta Cristina, acompañada por tres de sus cuatro hijos (Pablo se encuentra actualmente entrenando en Francia, tras su fichaje por el HBC Nantes, equipo en el que quiere seguir creciendo como jugador de balonmano). Apenas estuvieron media hora en el Hospital Universitario Quirónsalud, pero su presencia tenía un gran valor simbólico, porque estrechaba lazos familiares de manera pública, después de su delicada situación personal y procesal.

Esta martes por la mañana eran la reina Sofía, una vez más, y después la infanta Elena, que llegaba conduciendo su propio coche, acompañada por sus dos hijos, Froilán y Victoria Federica, quienes están muy unidos a su abuelo y con quien comparten una de sus grandes pasiones, los toros. Todos ellos llegaban minutos antes de que el centro hospitalario emitiera el nuevo parte médico, anunciado para las doce de la mañana de este martes, en el que, como se esperaba, confirmaba que había sido trasladado a planta.

Después de una visita de cuatro horas, aproximadamente, en la que la reina Sofía abandonaba el hospital con su hija y sus nietos, llegaba otra de las sorpresas de la tarde: la infanta Cristina, que visitaba a su padre por segunda vez en veinticuatro horas.

Había una gran expectación por la visita a su abuelo de la princesa Leonor y la infanta Sofía, a quienes no veíamos en público desde las vacaciones familiares en Marivent, antes de marcharse a un destino privado, como cada año, que en esta ocasión no ha conseguido desvelarse. Ya ha llegado ese momento, una vez que el Rey emérito había abandonado la UCI para ser trasladado a planta.

Infanta Cristina Infanta Elena
El redactor recomienda