Menú
Aguacates de La Palma, el fruto saludable con propiedades especiales
  1. Bienestar
Superalimento

Aguacates de La Palma, el fruto saludable con propiedades especiales

Este manjar, del que existen múltiples variedades, es rico en vitamina E, C, A y minerales como potasio, hierro y magnesio

Foto: La Gaveta de los Aguacates de La Palma.
La Gaveta de los Aguacates de La Palma.

El cultivo de los aguacates en La Palma no es una novedad. Es un fruto habitual en la alimentación de los palmeros desde hace años. Aguacate para desayunar, para comer, para merendar, cenar y lo que sea necesario para adornar cualquier menú. Hay quien lo denomina 'la mantequilla saludable' y los españoles que llegaron a América lo bautizaron como 'la pera de las Indias'. El nombre tiene que ver con su forma. Además, el color del interior presume de un tono y una textura parecidos al fruto del peral.

Su consumo puede prevenir el desarrollo de enfermedades degenerativas

Ya en las crónicas del primer viaje de Colón aparecen datos sobre los cultivos entre los que se encontraba el aguacate. Según los libros de historia, el nombre es un derivado de la definición azteca 'ahuacatl', que significa 'testículo'; de ahí su fama como afrodisiaco.

Es rico en vitamina E, que protege la membrana de las células y el núcleo; tiene un gran poder antioxidante; posee vitamina C, A, minerales (potasio, hierro, magnesio), y a pesar de su materia grasa, no forma parte del club de los hidratos malos. Según estudios de nutrición, su consumo puede prevenir el desarrollo de enfermedades degenerativas. Unos 100 gramos de aguacate procuran el 25% de la energía que se precisa al día.

Algo parecido a lo que sucede con el aceite de oliva. Sus efectos en el organismo son tan beneficiosos que se ha convertido en un alimento imprescindible en la dieta cotidiana. Es rico en fibra, ayuda a absorber otros nutrientes que favorecen el buen funcionamiento del sistema nervioso, muscular e inmunológico.

El aguacate lleva tiempo formando parte de la alimentación diaria de las familias. Antes era un producto exótico que se utilizaba en los restaurantes de lujo, en zonas de locales gourmet o recetas muy alejadas de lo que supone la vida diaria. Todo esto ha cambiado y no solo por la moda de comida saludable. Lo que ahora se conoce en el mundo 'foodie' no es otra cosa que buscar alternativas para menús variados.

Múltiples variedades

La variedad más conocida en todo el mundo es el aguacate 'hass', ya que es la más exportable. Este tipo de aguacate tiene menos grasa porque la isla está en una zona semitropical y, por ello, puede estar mucho más tiempo en el árbol. Es decir, es un aguacate que tiene más ‘cate’ que ‘agua’. Por su parte, el que se suele encontrar en los puntos de venta habituales tiene más ‘agua’ que ‘cate’. Además, al margen de sus características de zona semitropical, por proximidad, se puede coger con una maduración más avanzada para traerlo a tienda.

Está también el antillano. Es un aguacate mucho más suave en boca, con matices diferentes y sabores almendrados, a frutos secos. Es menos denso en el paladar, pese a lo que pudiera parecer por su apariencia mantequillosa. Una ‘delicatessen’ absoluta muy típica de las viejas fincas palmeras. Pueden madurar en colores verdes, rojos o granates. Cada árbol es un mundo y en la isla quedan pocos, pues tienen, por su delicadeza, muy poca salida comercial para exportar.

placeholder La Gaveta de los Aguacates de La Palma.
La Gaveta de los Aguacates de La Palma.

Otra variedad es el anayen, que tiene un sabor muy suave e inconfundible y es de gran tamaño (pueden llegar a pesar más de un kilo). Además, es una variedad única, típica en Venezuela o Colombia. Sin embargo, en La Palma -por su particular tierra volcánica y clima menos extremo- adquiere nuevos matices, que también varían a lo largo del año. Están cultivados en la zona norte de la isla (Los Sauces, San Andrés, Barlovento...), donde la cosecha tarda más en madurar, por lo que cada uno de ellos es como ‘un plato cocinado a fuego lento’. Es posible conseguirlos hasta principios de febrero.

Y por último destacar los híbridos. Son frutos muy concretos, traídos por palmeros que regresaban de América con las semillas. Tras décadas en la isla con sucesivas replantaciones, han surgido unas frutas únicas que estarán en La Gaveta de los Aguacates de La Palma, en función de la disponibilidad y dependiendo del año y de las lluvias. Rarezas que llegarán con nombre y apellidos de quien los cultiva y guarda para nosotros. El objetivo es ir recuperando muchos de ellos que están abandonados o perdidos en el olvido.

El aguacate lleva años formando parte del paisaje de las islas Canarias. Ahora, un grupo de amigos palmeros y peninsulares enamorados de la isla ha decidido emprender este nuevo proyecto y abrir La Gaveta de los Aguacates de La Palma en pleno barrio madrileño de Chueca, en la travesía de San Mateo. Personajes conocidos como Alaska, Caco Senante o Ana Rosa Quintana ya disfrutan del lugar.

El cultivo de los aguacates en La Palma no es una novedad. Es un fruto habitual en la alimentación de los palmeros desde hace años. Aguacate para desayunar, para comer, para merendar, cenar y lo que sea necesario para adornar cualquier menú. Hay quien lo denomina 'la mantequilla saludable' y los españoles que llegaron a América lo bautizaron como 'la pera de las Indias'. El nombre tiene que ver con su forma. Además, el color del interior presume de un tono y una textura parecidos al fruto del peral.

Salud Alimentos
El redactor recomienda