Telefónica busca dueño para varios edificios en Madrid y Barcelona
Telefónica ha comenzado a soltar lastre inmobiliario. Y lo hace en un momento en el que los inversores han dejado de planear sobre el mercado para materializar operaciones. La compañía
Situado a escasos metros de la Gran Vía madrileña, es un activo muy atractivo por su ubicación, pero también por su calificación urbanística: residencial. Aunque Telefónica permanecerá como inquilino durante varios años, el futuro comprador del inmueble podrá destinarlo a viviendas en una zona con escasez de oferta.
Este edificio, situado a escasos diez minutos de la estación de Príncipe Pío y de Plaza de España es otro de los activos en venta de Telefónica. Cuenta con calificación urbanística residencial y busca nuevo dueño.
Otro de los edificios para los que Telefónica busca comprador. El solar tiene una superficie de casi 1.300 metros cuadrados y el edificio, 4.800. La calificación urbanística también es residencial.
Este edificio de 5.800 metros cuadrados también cuenta con calificación urbanística residencial. Es decir, una vez que Telefónica dé por finalizado el contrato de alquiler, el dueño podrá destinar el inmueble a viviendas.
Ha sido uno de los edificios vendidos en 2014. El solar tiene una superficie de 900 metros cuadrados, mientras que el edificio cuenta con 2.800 metros cuadrados. Su calificación urbanística es residencial.
Es uno de los cinco inmuebles vendidos por Telefónica en los últimos meses. Muy bien ubicado en el centros de Madrid, sobre los 1.700 metros cuadrados que ocupa su solar, el futuro inquilino podrá construir viviendas.
El edificio fue adquirido el año pasado por el propietario de Embutidos Martínez. Situado en la esquina entre la Plaza del Ayuntamiento y la calle Ribera de Valencia, dispone de siete alturas y casi 5.500 metros cuadrados de superficie. La calificación urbanística de este inmueble es dotaciones con uso alternativo comercial.
Fue vendido hace unos meses. El edificio dispone de una superficie de casi 2.500 metros cuadrados y en el futuro podría albergar viviendas, puesto que su calificación es residencial.
Este inmueble, con una calificación urbanística para infraestructuras, tiene una superficie de 4.000 metros cuadrados.
Telefónica ha comenzado a soltar lastre inmobiliario. Y lo hace en un momento en el que los inversores han dejado de planear sobre el mercado para materializar operaciones. La compañía que preside César Alierta ha cerrado en los últimos meses la venta de cinco edificios por los que ha ingresado 65 millones de euros y busca comprador para otros cuatro inmuebles por los que espera obtener otros 60 millones.
En la actualidad -y aunque el mercado espera que salgan a la venta nuevos activos-, Telefónica busca comprador para tres edificios en Madrid (en la calle Irún, cerca de la Plaza de Santo Domingo y en Moratalaz) y uno en Barcelona, en el barrio de La Sagrera.
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