Coches voladores y compactos: así será el futuro sobre cuatro ruedas
Coches que parecen a punto de despegar, reducidos hasta la mínima expresión para moverse con soltura en entornos urbanos o con carrocerías de espuma para proteger
AeroMobil es un auténtico coche volador: pasa de vehículo a avión en unos segundos. La empresa fabricante, del mismo nombre, promete haber combinado todo lo que la ingeniería ha aportado a ambas formas de transporte para ofrecer una experiencia "puerta a puerta". Cabe en cualquier aparcamiento, utiliza gasolina y puede despegar en cualquier lugar en el que haya unos cientos de metros en línea recta. Aun no se puede comprar ni sabemos cuánto costará, pero se pueden hacer reservas en su página web.
Inteligencia artificial más el placer de conducir del que tanto presume el fabricante alemán es lo que promete combinar con este concepto de coche del futuro. El vehículo, de curioso aspecto, tiene un asistente virtual, llamado Companion, que ayuda al conductor incluso se hace cargo de la conducción si se lo pides.
Con 3,8 metros y un pequeño motor cada rueda, este modelo es la apuesta futurista de Toyora por los coches de hidrógeno. La idea es conseguir un coche espacioso por dentro pero compacto en su tamaño total, además de ligero, de forma que la pila de hidrógeno sea más eficiente.
El Toyota Kikay es una mezcla de coche antiguo y coche extremadamente moderno. La maquinaria queda a la vista desde el motor hasta el tubo de escape. En su interior solo caben tres personas, todas sentadas en una sola línea, con los pasajeros a los lados del conductor.
El Faraday Future FFZERO1 es un concepto de coche eléctrico que recuerda inevitablemente al coche de Batman. Cuenta con un motor eléctrico en cada rueda que suman en total más de 1.000 CV de potencia. En teoría podría pasar de 0 a 100 km/h en 3 segundos.
El Faraday Future FFZERO1 es un concepto de coche eléctrico que recuerda inevitablemente al coche de Batman. Cuenta con un motor eléctrico en cada rueda que suman en total más de 1.000 CV de potencia. En teoría podría pasar de 0 a 100 km/h en 3 segundos.
El Nissan Motor Co's New Mobility es un coche 100% eléctrico y supercompacto, pensado en Japón para personas mayores u hogares unipersonales que necesitan un vehículo sencillo y pequeño para trayectos cortes.
Toyota creó el concepto de coche Fun Vii pensando en que los usuarios lo cambiasen a su voluntad como hacen con la pantalla de sus móviles o de sus ordenadores. También está equipado con la tecnología de la realidad aumentada para proporcionar información sobre la navegación.
La marca japonesa Toyoda Gosei es la autora de Flesby, un coche de pequeño tamaño y equipado con una carrocería blanda, con aspecto esponjoso, ideada a modo de airbags externos que se accionan en caso de colisión.
El F015 Luxury in Motion de Mercedes es un coche autónomo y totalmente opaco, pensado no solo como un vehículo sino como un salón móvil.
El F015 Luxury in Motion de Mercedes es un coche autónomo y totalmente opaco, pensado no solo como un vehículo sino como un salón móvil.
General Motors y Segway son los autores conjuntos de este Electric Networked Vehicle, un coche eléctrico de dos asientos de curioso aspecto, creado para moverse por la ciudad, fácil de aparcar y que se puede conducir de forma autónoma.
El Nissan Round Box es un descapotable en versión futurista, más pequeño para moverse cómodamente el ciudades atestadas pero inspirado en los deportivos más populares, e incluso en un bar de deportes, según sus creadores, donde la diversión es lo más importante.
El Suzuki Pixy es otro de esos vehículos pensados en Japón para personas que se desplazan solas y que por tanto no necesitan mucho espacio. Es eléctrico y no alcanza demasiada velocidad, ya que fue diseñado con la idea de que se mezcle con los peatones.
El Armadillo-T es un coche plegable creado en el Instituto Avanzado de Ciencia y Tecnología de Corea. Con una señal desde el móvil, el Armadillo se aparca solo y se plegará sobre sí mismo, reduciendo el espacio ocupado casi en la mitad.
El Vision Tokyo de Mercedes es coche pero parece una limusina futurista visto por fuera: tiene una estructura más alargada para otorgar más espacio, se puede conducir de forma autónoma y está equipado con todo tipo de lujos.
El Nissan Pivo2 es un concepto de coche con una cabina para tres pasajeros que rota 360 grados, de forma que siempre se puede ir en la dirección de la circulación y nunca hace falta circular hacia atrás.
Kia creó esta versión eléctrica de su coche Pop, con la que apostaba por las cero emisiones y por un diseño llamativo, con ventanas alargadas y unas puertas que se abren hacia arriba y más espacio en el interior para sus dos pasajeros.
El Toyota "Fine-X" que se ve en este diseño es un vehículo híbrido familiar que hace especial incapié en la accesibilidad de personas con movilidad reducida. De ahí la amplia apertura de sus puertas, que se despliegan hacia arriba, y sus asientos giratorios.
El fabricante alemán tiene un curioso diseño y está impulsado por un motor eléctrico con 100 kilómetros de autonomía y una velocidad máxima de 120 kilómetros/hora.
Con esas grandes ruedas, este concepto del Twizy Z.E. (zero emission) fabricado por Renault parece casi más un robot espacial como el Curiosity que un coche que puedas encontrarte cualquier día circulando por tu ciudad.
Este vehículo de Honda, una apuesta futurista por el transporte urbano, se llama Personal-Neo Urban Transport, o P-NUT, un juego de palabras con la idea de cacahuete, que se dice 'peanut' en inglés, y se pronuncia igual.
En los años 70 y 80, Opel comercializó un modelo llamado Monza, nombre que fueron heredando otros modelos y versiones. Este es el último, un híbrido con puertas elevables y un chasis modulable que permitirá adaptarlo a otros vehículos híbridos, solo eléctricos o solo con gasolina.
Coches que parecen a punto de despegar, reducidos hasta la mínima expresión para moverse con soltura en entornos urbanos o con carrocerías de espuma para proteger a sus ocupantes. Los vehículos del futuro no solo se conducirán solos, también tendrán aspectos muy diferentes a los nuestros.
La mayoría de estos modelos no llegarán a pisar las carreteras. Se han presentado en los últimos años en exposiciones y ferias de coches por todo el mundo, pero no pasarán de ser un concepto, un modelo de pruebas con los que los fabricantes tratan de llamar la atención y demostrar lo que saben hacer.
Pero sí que van marcando un camino, dando una idea de qué podremos ver en los coches del futuro. Y algunas de esas ideas son cuando menos sorprendentes.
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