Las mejores portadas de la historia del rock
De Elvis Presley a Nirvana. De los Rolling Stones a The Cure. De David Bowie a Santana. La historia del rock se cuenta a través de las
'Dark side of the moon' de Pink Floyd es la portada elegida por Taschen para este libro que recopila las mejores cubiertas de la historia del rock.
Año 1957. Little Richard estaba en su mejor momento como deja claro es orgásmica imagen que preside este disco. Por cierto, fue una colección de 'hitazos' que hicieron que el rock calara en el mundo adolescente.
Decir icono con The Beatles se queda muy corto. Portadas como las de 'With The Beatles' o 'Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band' son historia de la música. Para 'Revolver' Klaus Voormann combinó dibujos a tinta de los rostros de los cinco bealtes con imágenes que mostraban una cara más amable del grupo. Como curiosidad, busquen a Ringo sentado en el retrete y la imagen del diseñador pululando por el pelo de George.
Vaughan Oliver creó esta portada para 'Pop' de The Breeders. El diseñador gráfico explica en 'Rock Covers' que su forma de trabajar buscaba "dejar las cosas abiertas a la interpretación. Hay una idea detrás, en realidad lo primero que escribí en las paredes de un baño: "Sugerir es crear, describir es destruir". Y lo cierto es que sus cubiertas marcaron el tono visual de la discográfica londinense 4 AD, uno de los santuarios del punk de Reino Unido.
Diseñada por Janet Levinson y Chris Robinson, líder de The Black Crowes, la portada del tercer trabajo del grupo de Atlanta levantó en su momento una sonada polvareda. Tanto que la compañía quiso evitar a toda costa el vello púbico asomando por ese mini bikini con la bandera de Estados Unidos y editó otra portada con fondo negro en la que sólo se veía el bikini.
Si la portada de 'Aladdin Sane' con esa foto de Bowie con un relámpago en el ojo creada por Brian Duffy está en al retina de cualquier amante de la música, en este 'Hunky Dory' su imagen contemplativa y texturizada mostraba una cara más amable del cantante. Brian Ward captó esta instantánea y Terry Pastor le dio forma a la cubierta.
El primer disco de Led Zeppelin es uno de esos que ha marcado la historia del rock. Para esta cubierta, el diseñador George Hardie adaptó una foto real del accidente del dirigible Hindenburg de 1937. Aunque es imposible obviar en la evolución del grupo londinense la portada de su disco 'Led Zeppelin IV' sin ningún tipo de referencia a la banda y todo un ejemplo de las técnicas de impresión múltiple anteriores a la era digital.
Disco debut de Elvis Presley pero, sobre todo, primer disco de la historia del rock & roll. El origen de esta imagen, tomada por William V. 'Red' Robertson, ha sido durante años un auténtico misterio aunque se sabe que se tomó en el Fort Hommer Hesterly Armony de Tampa (Florida) el 31 de julio de 1955. Una portada que, como veremos más adelante, ha inspirado a varias generaciones de músicos.
Esta es otra de las grandes portadas de todos los tiempos. Henry Diltz ha contado varias veces que esta foto 'robada' se tomó en un hotel que estaba de moda en Los Ángeles. "Aquella carátula también tiene su historia. Habían encontrado aquel antiguo establecimiento llamado Morrison Hotel, pero el tío del mostrador no nos dejaba tomar fotografías sin la autorización del jefe, que no estaba por allí (…) Así que salimos del hotel e iba a pedirles que se pusieran delante de la ventana cuando vi una luz a través del cristal, miré dentro y vi que el tío se había metido en el vestíbulo. Entonces dije: ¡Rápido! ¡Todos adentro! Los chicos entraron, se pusieron delante de la ventana, les saqué un rollo de película y nos piramos", rememora en el libro.
McGuire no sólo era el bajista de Liquid Liquid sino que también trabajaba como ilustrador en las portadas de sus discos o en la revista New Yorker. "Nunca pusimos una foto del grupo en la cubierta, no buscábamos mostrarnos tal como éramos sino ante todo plasmar quesera música. Intentaba que la imagen reflejara la música, algo minimalista y muy directo", explica en una entrevista en el libro.
El tercer trabajo de The Clash asoció el punk y el compromiso social. Esta poderosa portada nos recuerda a la anterior de Elvis Presley y está protagonizada por una imagen de Pennie Smith en la que el bajista Paul Simonon se dispone a destrozar su instrumento en una actuación en Nueva York. Precisamente, esta foto ha sido elegida como la mejor del R&R de todos los tiempos por la revista 'Q' porque "inmortaliza el punto álgido del rock & roll: la pérdida absoluta de control".
El diseñador Gilbert Shelton pasó de ilustrar felicitaciones de obreros y empresas del sector del automóvil a dibujar cómics y pósters de conciertos. Pero no fue hasta finales de los sesenta cuando se centró en su actividad más artística, convirtiéndose en un ilustrador de culto con 'The fabulous Furry Freak Brothers' y esta portada que hizo para los Grateful Dead.
Mick Rock hizo esta mítica foto del diamante de los miembros de Queen. Pero además de esto, este disco siempre será recordado porque en vez de la cara A y B, tiene una blanca y otra negra con imágenes en el color correspondiente.
'Wal Among Us' fue el debut en el largo de Misfits. Un disco que tira del terror y la rebelión adolescente de los cincuenta y para cuya cubierta Gleen Danzig, cantante y fundador del grupo, se inspiró en dos películas de terror: 'The anrgy red planet', con su murciélago-rata-araña, y 'Earth vs. the Flying Saucers', con los platillos volantes. Una imagen oscurecida del grupo redondeada esta portada al más puro estilo del cine de serie B.
Una de las portadas más célebres de la historia y con más misterio. Andy Warhol, el padre del pop art, firmó esta gloriosa portada pero se cuenta que cuando 'The Velvet Underground & Nico' salió a la calle no se había registrado todavía la imagen de este plátano maduro. Desde entonces, las dudas sobre la propiedad de este icono siempre han estado en el aire.
De Elvis Presley a Nirvana. De los Rolling Stones a The Cure. De David Bowie a Santana. La historia del rock se cuenta a través de las más icónicas portadas de sus discos. Rock Covers (Taschen) reúne esa memoria visual a través de 750 portadas de álbumes legendarios pero también semidesconocidos.
Robbie Busch y Jonathan Kirby han sido los encargados de realizar en este libro (editado por Julius Wiedemann) esta difícil selección en base a cuatro premisas: unir en estas 550 páginas cubiertas de discos clásicos e imprescindibles de la historia del rock junto a rarezas codiciadas por coleccionistas, portadas que son auténticas obras de arte y esas que tienen una historia detrás.
"A todas las personas vinculadas de por vida a estas cubiertas les une un sentimiento aparentemente universal: la importancia que cobra una imagen, por mundana que sea, cuando va unida a un disco fuera de serie", resumen. Porque, en realidad, Rock Covers responde a ese fenómeno universal por el que cuesta mucho imaginar un disco que nos haya marcado sin que nos venga a la cabeza la imagen de su portada.
El libro se completa con fichas sobre los diseñadores o fotógrafos de cada una de las portadas así como con entrevistas con diseñadores gráficos, artistas y musicos y una lista con los diez mejores álbumes de rock para diez reconocidos DJs del género como John Holmstrom, Tom Sorrells o Geoffrey Weiss.
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