Cómo saber si me afecta o no el cambio en las nuevas tarifas eléctricas

a subida no afectará a todos los consumidores por igual. Lo hará en mayor medida a aquellos que estén acogidos a la modalidad de precio regulado (PVPC)

Por Romina Vallés

Ahora que poco a poco vamos volviendo a la normalidad y a las costumbres vecinales de siempre, dos mujeres charlan, –mascarilla y metro y medio de distancia mediante, eso sí– en la puerta de entrada a la comunidad: “Ayer me acosté a las dos de la mañana poniendo lavadoras”, comenta una. “¿Pero así se ahorra? Qué manera de complicarnos la vida”, responde la otra. Las nuevas tarifas eléctricas, que penalizan los consumos en horas punta y fomentan el consumo en horas valle, están en boca de todos y, ante lo confuso de la cuestión, es lógico que el consumidor se haga estas y otras preguntas.

En este artículo pretendemos resolver algunas dudas al respecto y, antes que nada, es de rigor que respondamos a la primera: ¿Por qué este cambio de tarifas, ¿cuál es el objetivo? La finalidad es fomentar un consumo de energía más eficiente. Y por mucho que pensemos que esto no va con nosotros, que no podemos hacer nada al respecto, lo cierto es que podemos hacer mucho por los Objetivos de Desarrollo Sostenible marcados para 2030 y para lograr la descarbonización en 2050.

Para reducir las emisiones es necesario que una buena parte de actividades que usan combustibles fósiles pasen a funcionar con electricidad y que esta se genere de fuentes sostenibles, con bajas o nulas emisiones de CO2. “Esto supondría multiplicar las inversiones en infraestructuras (centrales, líneas eléctricas...) para usarlas solo durante unas horas del día, lo que acabaría encareciendo la electricidad. Por tanto, la manera más eficaz para electrificar la economía sin aumentar los costes es que el consumo se realice lo más uniformemente posible a lo largo del día. De ahí que se bonifique el consumo en horas con menor demanda, por la noche y fines de semana, y que tenga un precio mayor a determinadas horas del día”, explica Koldo Muruzabal, director de marketing de Endesa.

La siguiente pregunta: ¿es verdad que esto beneficia a las eléctricas? "A las comercializadoras ni las beneficia ni las perjudica. El cambio sirve para facilitar la transición a una economía electrificada", matiza Koldo Muruzabal. Pero la cuestión más importante para el consumidor es cómo saber si le afecta el cambio. Lo primero, un recordatorio de cómo funciona esta discriminación horaria en tramos de la nueva factura de la luz:

El cambio nos afecta a todos. Se abarata la parte fija del recibo a cambio de encarecer el consumo de energía en horas punta. Por lo que, si tenemos presente a qué hora es más barata la luz y evitamos consumir en horas punta, ahorraremos más en nuestra factura.

Pero el nuevo sistema no afectará a todos los consumidores por igual. Lo hará en mayor medida a aquellos que estén acogidos a la modalidad de precio regulado (PVPC), fijado por el Gobierno; en este caso se aplicarán los nuevos periodos de discriminación horaria en los precios de la electricidad automáticamente. Si estamos en precio libre, fijado por la compañía eléctrica, dependerá de cada comercializadora y deberemos escoger el producto que mejor nos convenga de todos los que nos ofrecen. Para saber si estamos en una modalidad u otra, basta con consultar la factura, en la que aparecerá el nombre de la comercializadora si es libre y la especificidad ‘PVPC’ si es regulado.

Dos potencias diferenciadas

Con la llegada de la nueva tarifa también aparece la opción de contratar dos potencias diferentes. ¿Esto qué significa? La potencia contratada se mide en kW y es la potencia máxima de electricidad de la que podemos disponer en el mismo momento: por tanto, limita es el número máximo de aparatos que podemos tener funcionando a la vez. Hasta ahora solo se podía tener una única potencia y cada usuario se veía obligado a contratar una que cubriese sus necesidades máximas, aunque estuvieran concentradas en una franja horaria muy concreta. Con la nueva regulación, se puede contratar una potencia mayor para la noche y otra menor el resto del día o según las necesidades.

He aquí unos consejos que harán que este cambio en la factura no sea tan drástico en horarios ni gasto:

Por último, ¿cómo evitar que el cambio en la factura nos afecte, con una tarifa plana? "No todas las tarifas son iguales —explica Muruzabal— las hay que son en forma de cuota fija, pero penalizan si hemos sobrepasado el consumo; en otras se paga hasta ciertos kWh, pero podemos llegar a pagar el doble si nos excedemos en el consumo. Se trata de optar por una tarifa plana que sea real, que parta de un análisis de perfil de consumidor y en la que si te excedes, no tengas penalización. Este tipo de tarifa aporta tranquilidad porque no hay que estar pendiente de si consumes de día o de noche".