Las cámaras de seguridad de un puesto de control situado en la frontera de Siria con Turquía han captado el instante en el que se produce la explosión de un coche cargado de explosivos. En ese punto trabajaban varias personas. Cuatro civiles y tres policías han resultado heridos, según los servicios de emergencias, aunque hasta no hay confirmación de víctimas mortales. De momento, ningún grupo terrorista ha reinvindicado este nuevo ataque bomba, pero las sospechas recaen sobre el autodenominado Estado Islámico. Podría ser una contraofensiva por los últimas operaciones de la coalición que lidera Estados Unidos para acabar con los escasos reductos que aún mantienen los yihadistas.