La presencia en los medios de comunicación de Tamara Falcó es habitual, pero pocas veces como la acontecida el pasado sábado en el plató de Hay una cosa que te quiero decir de Telecinco. Acudió al programa de Jordi González para dar una sorpresa a una niña guineana que había contado con la hija de Isabel Preysler como principal apoyo para superar sus dificultades. Pero con lo que no contaba la socialité es que había reservada para ella una sorpresa muy especial. Al otro lado de la carta le esperaba una de sus asistenta del hogar, que le quería dar un mensaje de agradecimiento por ser algo más que empleada-jefa: “Eres muy noble, luchadora y con un corazón enorme”, lo que terminó con Falcó entre lágrimas.