Loading...
Puedes configurar tu consentimiento pulsando aquí :

Los inventos del siglo XX que revolucionaron nuestras vidas

Si pidiésemos a varias personas una lista de los inventos más importantes del siglo XX seguramente todos elegirían los mismos: la televisión, internet, la píldora, los

Antes de que la lavadora eléctrica aterrizara en prácticamente todas las casas de Europa, existió su predecesora, esta lavadora manual. En la cuba de madera se introducía agua caliente, jabón y la ropa sucia, se colocaba la tapa y se daba vueltas con la manivela. En su interior, un disco con estrías contribuía a agitarla. A pesar de que el trabajo físico seguía siendo necesario, la ventaja estaba en poder lavar varias prendas al mismo tiempo.

Fue el primer sistema de grabación y reproducción de sonido en disco plano. Fue patentado por Emile Berliner en 1888 y mantuvo su popularidad durante toda la primera mitad del siglo XX, hasta que fue poco a poco sustituido por los tocadiscos y sus vinilos.

El antecesor de las gafas 3D. Este aparato, patentado en 1905, presentaba ante cada ojo una imagen con perspectiva ligeramente distinta, causando la sensación de que se veía en relieve.

Aunque los primeros refrescos con gas aparecieron en el siglo XIX, fue a principios del siglo siguiente, con el embotellado, cuando se hicieron más populares. Las saturadoras se utilizaban para disolver el dióxido de carbono en el agua.

Ciertamente, es más aparatoso que los que hay hoy en día en muchas casas, pero su objetivo es el mismo: contabilizar el consumo de gas en las casas.

Aunque las primeras planchas eléctricas comenzaron a venderse a principios de siglo, durante años convivieron con sus predecesoras más rústicas. Algunas se calentaban sobre los fogones; otras, como esta, tenían un depósito interior que se cargaba con brasas para mantener el calor.

Los instrumentos de cuerda eran difíciles de grabar con calidad suficiente, así que el ingeniero John Stroh patentó este invento a finales del silo XIX. El cono de metal amplificaba el sonido, dirigiéndolo directamente al punto de registro. En los años 20, al popularizarse los micrófonos, su uso decayó hasta desaparecer.

Era raro verlo en las casas, donde las tabletas de chocolate se picaban a mano para disolverlas más fácilmente en agua o leche, pero todos los niños conocían los molinillos de chocolate porque aparecían frecuentemente en canciones y villancicos.

De nuevo, la primera versión de un objeto que ha llegado hasta nuestros días. Inventado en 1891, su uso tardó en extenderse pero finalmente se impuso, usándose para medir el recorrido del automóvil, el taxi, y marcando la tarifa a pagar por el pasajero.

Se trata de un micrófono de carbón, inventado en el siglo XIX, popularizado a la vez que la radio y cuya tecnología se implementó después también en los teléfonos al ser la más adecuada para captar la voz humana. Estaban basados en el carbón: un pequeño depósito de grafito cubierto por una membrana que recibe las ondas sonoras, desordenando las partículas del interior y provocando una variación de resistencia y, con ello, de corriente.

Antecesora de las que hoy ocupan un espacio en miles de cocinas. Al aumentar la presión en el interior, se reduce el tiempo de cocción necesario de los alimentos. Patentada en 1919, se hizo popular a mediados de los años veinte al comercializarse junto a un libro con 360 recetas.

Hasta que llegaron las grabadoras magnéticas en los año 60, estos dispositivos se utilizaban habitualmente para grabar discursos que debían ser mecanografiados.

Se considera la predecesora de las calculadoras científicas, ya que permitía introducir hasta 16 dígitos, permitiendo operaciones de gran precisión. En esta, las cuatro operaciones básicas podían hacerse de forma automática.

Este modelo a manivela se atornillaba en las mesa de las oficinas y en los colegios hasta que los modelos de mano y los bolígrafos lo convirtieron en una antigualla.

En los años 50 unas medias eran en España casi un objeto de lujo por su alto precio, de forma que cuando se rompían, lo habitual era llevarlas a las mercerías para que las arreglaran. Esta máquina servía para coger los puntos sueltos en una carrera, un trabajo que requería de una gran habilidad.

Liar cigarrillos a mano fue habitual durante gran parte del siglo XX y mucha gente tenía estas pequeñas máquinas en casa que ayudaban a hacerlos más rápidamente y más uniformes. En el recipiente superior se introducía la picadura de tabaco y con la manivela se iba metiendo dentro de los cilindros de papel de fumar ya enrollados.

En una época donde aún mucha gente no tenía agua corriente en sus casas, la falta de higiene y los malos olores podían ser un problema, especialmente en espacios públicos muy concurridos, como los cines y los teatros. Estos aparatos se utilizaban para esparcir perfumes que enmascarasen el olor.

Los juegos de química que han llegado a nuestros días ya entretenían a los niños en los años 60. Contenían todo lo necesario para montar un pequeño laboratorio, como tubos de ensayo y mecheros, además de una gran variedad de sustancias químicas, muchas de ellas hoy prohibidas por peligrosas.

Que el hombre pusiera el pie en la Luna fue mérito de Estados Unidos, pero se vivió con emoción en gran parte del mundo, y España no fue menos. Este globo lunar, semejante a un globo terráqueo, reflejaba la geografía del satélite, incluyendo los puntos donde habían aterrizado las distintas sondas.

En los años 70 se popularizó el pago con tarjeta de crédito, y con él máquinas como esta que las validaban, para que el cliente operase con la seguridad necesaria.

Este aparato fue relativamente popular en los 60 y 70, y con uno de ellos fue grabado el asesinato de John Kennedy. Este modelo introducía una serie de mejoras en la línea de las antecesoras de la cámara de vídeo: contaba con zoom automático y permitía grabar en formato súper 8.

Este dispositivo tenía una capacidad de 500 megabytes, 100 en cada uno de sus cinco discos (tenía un sexto de reserva). Se llamaban duros porque estaban hechos de metal, en contraposición a los disquetes, fabricados en plástico.

Este curioso 'dos en uno' responde a un contexto muy concreto. En los años 80 era habitual que las familias salieran de vacaciones, y querían llevar con ello todo lo que consideraban imprescindible, así que se impuso la necesidad de avivar el ingenio y combinar funciones para llevar todo lo posible en el mínimo espacio.

Sony lanzaba en 1994 su Play Station. Fue pionera en el uso de CD-ROM para sus juegos y se considera la más exitosa de su generación: vendió más de 100 millones de unidades hasta su retirada en 2005.

En 1998 la operadora R instalaba este tipo de cable de fibra óptica, que constaba de 256 fibras o finos hilos de vidrio por los que se enviaban mensajes codificados en pulsos de luz.

 

Si pidiésemos a varias personas una lista de los inventos más importantes del siglo XX seguramente todos elegirían los mismos: la televisión, internet, la píldora, los antibióticos... Todos estos objetos cambiaron sin duda y para siempre nuestras vidas y fueron el primer paso hacia nuevas ideas, industrias y sectores económicos.

Pero junto a ellos convivieron otros cientos de miles de inventos más modestos, pequeños y efímeros que marcaron la vida cotidiana de los habitantes de esas décadas ya pasadas. Muchos no han llegado a nuestros días, aunque no serán pocos los lectores que recuerden haber convivido con algunos de ellos. Estos son solo algunos de ellos que suponen un curioso repaso a toda una época.

(Imágenes cedidas por la Fundación Española de la Ciencia y la Tecnologia)

Principales Tags

Hoy en portada