Los últimos exploradores españoles en la selva de Papúa en tiempos de guerrilla y pandemia
Papúa, la parte oriental de la isla de Nueva Guinea, está cubierta por una exuberante selva, hogar de tribus aisladas donde todavía se conservan cientos de
El equipo de la expedición, Olmo Romero, Diego Cortijo, Tatiana Pankratof, Anni Manufandu (traductora) y los porteadores.
Una mujer baudi en el Lago Bira. La presencia de misioneros cristianos ha provocado la pérdida de la práctica totalidad de costumbres y hábitos tradicionales en esta comunidad.
Tatiana Pankratof entrevista a unos Baudis en Kasonaweja. El trabajo de los exploradores consistía en obtener información preguntando de aldea en aldea.
La expedición sufrió cortes de horas en la carretera de acceso desde Jayapura al río Baliem.
Pankratof en uno de los campamentos improvisados durante la travesía.
Diego Cortijo atraviesa el río junto a la comunidad de Kwerba.
Thomas, el guía local de la expedición, navegando al atardecer por el rio Mamberano
Olmo Romero y Tatiana Pankratof charlan de noche en el campamento.
Diego Cortijo toma datos con GPS durante la expedición.
Papúa, la parte oriental de la isla de Nueva Guinea, está cubierta por una exuberante selva, hogar de tribus aisladas donde todavía se conservan cientos de lenguas indígenas. También es el inestable escenario de un movimiento secesionista que reivindica la independencia de Indonesia. De sus profundidades acaba de retornar con éxito la expedición española ‘Mamberano’, que ha desafiado a los elementos, la guerrilla y la pandemia para explorar donde pocos van, cuando nadie va.
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