Ayuso ultima el Plan Vive II: 1.137 alquileres asequibles en Boadilla, Pinto y Colmenar

La Comunidad de Madrid ultima el lanzamiento de la segunda fase del Plan Vive, uno de los proyectos más ambiciosos en materia de alquiler de vivienda en España en los últimos años. Un solo lote, cinco parcelas y un total de 1.137 viviendas en alquiler a precios asequibles.

Tras adjudicar el pasado mes de septiembre las primeras parcelas al fondo norteamericano Ares y la promotora Culmia, sobre las que en breve comenzarán la construcción de 5.400 viviendas en alquiler a un precio asequible, Isabel Díaz Ayuso espera irse de vacaciones con la segunda fase del Plan Vive en marcha.

De hecho, se espera que el lanzamiento del nuevo concurso tenga lugar antes de agosto, según confirman a El Confidencial desde la Consejería de Medio Ambiente y Vivienda de la Comunidad de Madrid.

Un solo lote, cinco parcelas y un total de 1.337 viviendas en alquiler a precios asequibles

En esta ocasión, el número de parcelas es sensiblemente inferior a la primera fase, así como el número de viviendas. Es decir, se trata de un Plan Vive mucho más pequeño que el anterior. Hablamos de 1.137 viviendas distribuidas en cinco parcelas, pero agrupadas en un único lote, frente a las 46 parcelas y los cinco lotes de la primera fase del Plan Vive. Aquellas parcelas estaban repartidas en 14 municipios y sumaban 6.600 viviendas, si bien uno de los lotes quedó desierto, y finalmente se construirán 5.400 unidades.

En esta ocasión, los suelos se ubicarán en tres municipios. Boadilla del Monte —una sola parcela para 524 viviendas—, Pinto —unas 400 viviendas en una parcela— y Colmenar —tres parcelas y 213 viviendas—, según las mismas fuentes.

Ampliará la concesión a 65 años

Una de las principales novedades de esta nueva licitación será el plazo de la concesión. Frente a los 50 de la primera fase del Plan Vive, la Comunidad de Madrid ha decidido ampliar dicho plazo hasta los 65 años, con el objetivo de asegurar una mayor concurrencia ante el nuevo contexto social derivado de la guerra de Ucrania y el fuerte incremento de los costes de construcción y la inflación.

Una decisión que tanto inversores como promotores aplauden, ya que consideran que el plazo de la concesión afecta directamente a la rentabilidad del activo, así como a su liquidez.

Y que garantiza el objetivo del plan, "al poder ofrecer viviendas asequibles en la Comunidad de Madrid a precios un 40% por debajo de los precios del mercado y en el menor tiempo posible. Esta ampliación también ofrece una mayor seguridad jurídica al inversor que apuesta por este proyecto pionero de colaboración público-privada", destacan fuentes de la Consejería de Medio Ambiente y Vivienda.

Se amplía la concesión de 50 a 65 años para asegurar una mayor concurrencia

El Plan Vive es la gran apuesta de la Comunidad de Madrid para construir hasta 25.000 viviendas de alquiler accesible en los próximos seis años, un proyecto que arrancó oficialmente en enero de 2021, con una primera fase. Más de la mitad de esta cifra, unos 15.000 pisos, está planificada para esta legislatura.

Una vez publicado en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCM) se abrirá de nuevo el plazo para que inversores y promotores hagan números para presentar sus ofertas y, en esta ocasión, con un único lote y un mayor plazo de adjudicación, se espera una mayor concurrencia.

Hay que recordar que las primeras 5.400 viviendas fueron adjudicadas en diciembre de 2021 a Ares y Culmia, un proceso al que solo terminaron concurriendo estos dos candidatos y en el que quedó desierto uno de los cuatro lotes que se sacaron a concurso.

Lección aprendida

Con la lección aprendida, y en un escenario marcado por el alza de la inflación y el fuerte incremento de los costes de construcción, el Ejecutivo regional ha valorado fórmulas para garantizar el complejo equilibrio que se necesita para combinar la rentabilidad del inversor privado con una renta asequible para los inquilinos, lo que habría conseguido vía la mencionada ampliación del plazo de concesión.

Pero, además, como avanzó El Confidencial, el Gobierno madrileño está trabajando con la idea de destinar el dinero procedente de los fondos europeos a respaldar financieramente su plan de vivienda asequible. Para ello, contaría con un cheque de hasta 70 millones de euros.

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Al tratarse de vivienda asequible, la rentabilidad de este proyecto es muy ajustada, en torno al 5%, lo que hace que sea especialmente sensible a un contexto de incremento del precio de las materias primas e incertidumbre como el actual. Es aquí donde los fondos europeos podrían jugar en beneficio del plan, al ofrecer un colchón financiero con el que abordar una construcción de las viviendas más cara que la diseñada hace dos años, cuando se lanzó Vive.

Respecto a los precios de los alquileres de las futuras viviendas, si tenemos en cuenta los datos de la plataforma tecnológica Pulse, de urbanData Analytics (uDA), la horquilla de precios en la primera fase del Plan Vive se moverá entre loa 468 euros, en Torrejón de Ardoz, y los 779 euros de San Sebastián de los Reyes o los 800 de Valdebebas.