Martinsa Fadesa 'coloca' activos por 1 M, pero sin oferta por el campo de golf de Aranjuez

Un millón de euros. Esa es la cifra que ingresarán los acreedores de Martinsa Fadesa tras la enésima subasta judicial de algunos de sus activos, entre los que figuraba uno muy particular, un campo de golf de 18 hoyos en Aranjuez (Madrid), el más caro de todos ellos.

La subasta de estos activos —24 lotes— fue publicada en el portal de subastas judiciales en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y ya ha concluido. Sobre ellos recaía una deuda conjunta de 2,8 millones de euros, mientras que la cantidad finalmente alcanzada ascenderá al millón de euros.

No es la primera vez que el administrador concursal intenta la venta de este campo de golf. Hace un año salió a subasta por 1,6 millones de euros y ahora, al igual que entonces, la subasta ha quedado desierta. Nadie ha mostrado su interés por un activo tan peculiar, a pesar de que en esta ocasión su precio se había rebajado a la mitad: 800.000 euros.

El campo de golf se subastaba, individualmente, junto a otros activos, algunos de los cuales sí han despertado el interés de potenciales compradores. En concreto, se han recibido ofertas por 10 de los 24 lotes por un importe cercano al millón de euros, siendo las dos ofertas más elevadas, de 232.000 y 316.000, las realizadas por dos viviendas en la Gran Vía de L'Hospitalet de Llobregat, en Barcelona.

El resto de ofertas presentadas se mueve entre 40.000 y 100.000 euros, y afectan a varias viviendas en Las Palmas y en Ayamonte (Huelva), además de un par de parcelas junto al campo de golf, en el Pau de la Montaña, en Aranjuez, un barrio que la compañía gallega levantó en 2003 y que dejó graves desperfectos en la misma tras entrar en concurso de acreedores.

De 1,6 millones a 800.000 euros por el campo de golf

El resto de lotes han quedado desiertos, incluido el campo de golf, que había salido a subasta por algo menos de 800.000 euros, la mitad que el precio fijado en febrero de 2021 para su subasta (1,6 millones). Este era, sin duda, el activo aparentemente más atractivo y más caro a subasta. Un campo de 18 hoyos, Par 72, una superficie aproximada de 51 hectáreas y situado junto al Hotel Barceló y al Casino de Aranjuez. Junto al campo de golf, se subastaba asimismo una nave de mantenimiento y un campo de prácticas. Todo a partir de 800.000 euros.

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E. Sanz

Según la ficha con el detalle descriptivo del activo, el campo de golf se encuentra arrendado a la empresa Concept Green desde 2018, con una "prórroga anual tácita hasta el 31 de diciembre de 2020". Debido a la pandemia, el campo de golf no se encuentra actualmente en funcionamiento y, "al no estar resuelto el contrato, la parte arrendataria podrá ejercitar el derecho de adquisición preferente" del mismo.

El futuro propietario del campo de golf, sin embargo, no estaría obligado a subrogarse en el contrato de arrendamiento con esta compañía, quien debería abandonar la propiedad en 30 días.

Sobre este activo pesan diferentes cargas y gravámenes, así como gastos que deberá asumir el futuro propietario, como, por ejemplo, 63.642 euros correspondientes a las cuotas del IBI o la comunidad de propietarios anteriores a 2015. Además, Martinsa Fadesa firmó en 2012 un convenio de colaboración con el Canal de Isabel II para el riego del campo de golf, un convenio que aún no se ha iniciado, pero cuyos gastos también debería asumir el futuro propietario: 746.611 euros, a razón de 74.661 euros anuales durante los próximos 10 años.

Sin olvidar los gastos derivados de la adjudicación del campo de golf, como los gastos notariales, de registro, etc., además de la plusvalía municipal, que asciende a 113.000 euros. Además, sobre el campo de golf recae un privilegio especial a favor del Ayuntamiento de Aranjuez sobre las fincas del sector, en las que penden obras de ejecución y cuya realización subsidiaria asciende a 23,6 millones de euros, circunstancia que ha sido reconocida en una sentencia del Juzgado de lo Mercantil n.º 1 de A Coruña y confirmada por la Audiencia Provincial.

Gastos y trabas que restan atractivo al campo de golf y que juegan en contra del interés de un futuro interesado, que podría esperar de nuevo a una nueva rebaja del activo si vuelve a salir a subasta.

El campo de golf fue comprado por Martinsa Fadesa en abril de 2005, cuando la burbuja inmobiliaria aún no había alcanzado su punto álgido y la posibilidad de una quiebra como la que se produjo años después era completamente impensable. Tras declararse en concurso de acreedores el 24 de julio de 2008, el Juzgado de lo Mercantil n.º 1 de A Coruña declaró en marzo de 2015 la apertura de la fase de liquidación de la compañía, que aún no ha concluido.