El alquiler, ¿en caída libre en Madrid y Barcelona? Rebajas de más del 10% en un año

Buenas noticias para los inquilinos, malas para los caseros. Los precios de los alquileres siguen en caída libre en dos de los mercados más tensionados como Madrid y Barcelona, pero las bajadas de precios son casi generalizadas en toda España.

Para que nos hagamos una idea, si hace un año alquilar una vivienda en Barcelona o Madrid podía suponer, de media, un desembolso mensual de 900 euros, ahora, ese mismo alquiler sería 90 euros más barato al mes, una cifra nada desdeñable, puesto que al año estaríamos hablando de algo más de 1.000 euros, una cifra que serviría a cualquier inquilino para aportar la fianza de esa misma vivienda.

Así lo revelan los datos correspondientes al mes de abril de Fotocasa, que muestran cómo el precio de la vivienda en alquiler ha caído un 5,6% interanual en España respecto a los precios del mismo mes de 2020, aunque con diferencias muy notables por ciudades, y con Madrid y Barcelona, dos de las ciudades donde más habían subido en los últimos años, a la cabeza de los ajustes, como se puede apreciar en el mapa inferior.

“El mercado se mueve a diferentes velocidades. Por tercer mes consecutivo el dato interanual muestra caídas muy significativas coincidentes con las comunidades más tensionadas históricamente como Madrid, Barcelona o Baleares, y si ponemos 'zoom' en las capitales de provincia, detectamos los descensos más pronunciados de los últimos seis años", explica María Matos, la directora de estudios y portavoz de Fotocasa.

"Probablemente esta tendencia se mantenga en el tiempo mientras la normalidad se implante realmente en España. También es cierto que vemos subidas mensuales en ciertas ciudades, podría deberse a que en esas zonas todavía no se han alcanzado precios máximos y a la paulatina reactivación del mercado debido al éxodo de las grandes urbes”, añade.

Barcelona, primera de las grandes ciudades en registrar los primeros descensos de los alquileres, sigue en caída libre. En concreto, los pecios son ahora un 11,2% más baratos que hace un año, con caídas anuales en todos sus distritos y con caídas superiores a los dos dígitos excepto en Horta - Guinardó Gràcia (-16,4%), Sarrià - Sant Gervasi (-11,9%), Sant Martí (-13,9%), Ciutat Vella (-19,1%), Eixample (-18,3%), Horta – Guinardó (-8,9%), Sant Andreu (-16,4%), Les Corts (-13%), Sants – Montjuïc (-13,4%) y Nou Barris (-11,3%).

La Ciudad Condal ya mostraba síntomas de agotamiento en cuanto a precios antes de la pandemia; pero tras el coronavirus, las rebajas de los alquileres son cada vez más evidentes y se han impuesto de manera generalizada en toda la ciudad. Y lo mismo sucede en Madrid capital, donde —al igual que en Barcelona— muchos de sus distritos, paradójicamente, fijaron máximos en los alquileres en plena pandemia y ahora han iniciado una fuerte corrección a la baja.

La caída en la provincia es del 10,7% en los últimos doce meses, mientras que en la capital, los recortes generalizados en todos los distritos analizados por Fotocasa. Latina lidera las caídas (-16,3%), seguido de Puente de Vallecas (-14,2%), Arganzuela (-14,4%) y Tetuán (-14%). Por encima del 10% se sitúan también las bajadas de precios en Chamartín (-13,5%), Usera (-12%), Ciudad Lineal (-10,1%), Centro (-13,6%), Carabanchel (-12,3%), Salamanca (-10,5%) y Retiro (-11,1%).

El enorme trasvase de pisos turísticos hacia el alquiler tradicional, como consecuencia de la pandemia, ha incrementado sensiblemente la oferta de viviendas en alquiler en ambas ciudades lo que, según los expertos ha contribuido a aliviar las tensiones en ambos mercados.

A esto se han sumado las dificultades económicas de miles de hogares como consecuencia de la crisis derivada de la pandemia -ERTEs, EREs, desempleo...- que ha obligado a muchos caseros a renegociar las rentas con sus inquilinos y a muchos inquilinos a abandonar sus pisos en busca de alquileres más asequibles. Factores todos ellos que, como aseguran los expertos, han provocado el pinchazo de la burbuja de los alquileres que ha llevado a máximos las rentas en las grandes ciudades.