¿Cuánto cuesta un alquiler en la costa? Aquí tienes los precios playa por playa

Con las vacaciones a la vuelta de la esquina para muchos españoles, llega el momento de elegir destino para disfrutar de unos días de descanso. Pero, primero, es necesario hacer números. Al igual que ha sucedido en mercados como el de Madrid, Barcelona o las islas, los precios de los alquileres se han estancado en el último año después de varios ejercicios al alza en la mayoría de las zonas costeras españolas donde, por otra parte, existe un amplio abanico de precios.

En muchas zonas costeras, los alquileres son muy similares a los del año pasado, ya que apenas se han encarecido un 0,6% hasta situar la media de una semana en la playa en torno a 755 euros, apenas cinco euros más que el verano pasado. Un síntoma más de que el bolsillo de muchos españoles ha empezado a llegar a su límite.

El abanico de precios sigue siendo muy amplio, de tal manera que optar por las islas para una semana de vacaciones, por ejemplo, puede ser 220 euros más de caro de media que en el Mediterráneo. Puerto Banús y Marbella (Málaga), Illa da Toxa y Sanxenxo (Pontevedra), Ibiza, Andratx y Alcudia (Islas Baleares), Sotogrande y Puerto de Santa María (Cádiz), Sitges (Barcelona), Hondarribia y San Sebastián (Guipúzcoa) o Cadaqués (Girona) mantienen los precios más elevados, por encima de los 1.200 euros la semana, mientras que las zonas más económicas son Burela, Foz y Vicedo (Lugo), El Saler (Valencia), Muros (A Coruña), Mogán y Puerto de la Cruz (Islas Canarias), en donde se pueden conseguir estancias entre 210 y 380 euros semanales.

“El mercado de alquiler en la costa, más flexible y por tanto más rápido en adaptarse, puede entenderse, con todas las matizaciones necesarias, como un referente anticipado del mercado inmobiliario general. Por tanto, una posible conclusión sería que estos datos anticipan una fase de estabilización en los mercados inmobiliarios”, señala Fernando García-Marcos, director técnico de TecniTasa (Técnicos en Tasación).

Puerto Banús es el destino más caro: un apartamento de 85 metros cuadrados cuesta unos 2.600 euros por siete días en agosto

Precisamente, y como cada año, TecniTasa ha publicado su informe anual sobre los precios máximos y mínimos del alquiler en primera línea de playa en las costas españolas, que muestra, como en ediciones anteriores, una oferta muy variada, desde un apartamento de 85 metros cuadrados en Puerto Banús (Málaga) por 2.600 euros por siete días en agosto a un piso de 90 metros en la Isla de La Toja por 1.800 euros u otro en el puerto de Ibiza por la misma cantidad de dinero y 100 metros cuadrados.

En el extremo opuesto, por su parte, nos encontramos con las ofertas más asequibles en las playas de Burela o Vicedo en Lugo, donde por una horquilla de entre 210 y 250 euros podríamos disfrutar durante siete días de un piso de 60 metros cuadrados.

Puerto Banús, lo más caro

Precisamente en Andalucía, según TecniTasa, se encuentra el precio más alto de toda España para un alquiler semanal. Los bolsillos más acaudalados pueden disfrutar de siete días en Puerto Banús (Marbella) por la suma de 2.600 euros antes mencionada. Sotogrande (1.500 euros) y Puerto Sherry y Vistahermosa (1.250 euros) o Costa Ballena en Rota (1.150 euros) en Cádiz son otros destinos que podríamos denominar también cercanos a lo prohibitivo.

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E. Sanz

En el extremo contrario y como propuestas más asequibles en Andalucía, podemos mencionar la zona de El Zapillo en Almería, en donde se pueden alquilar 80 metros por 425 euros, o el paseo marítimo de Castell de Ferro, en Granada, o el Algarrobo, en Málaga, donde por 500 euros a la semana se puede optar a apartamentos entre 50 y 70 metros cuadrados.

"La amplia oferta y la diversidad de propuestas para disfrutar de vacaciones en el litoral español este año se mantienen, pero con la característica principal de que en esta ocasión el esfuerzo económico que debemos realizar no se incrementa como había sucedido en años anteriores", señala José María Basañez, presidente de TecniTasa.

"Si optamos por irnos al norte, nos encontramos que en dos de las comunidades autónomas los precios entre lo más caro y lo más barato están muy cercanos, de tal forma que en Cantabria tan solo 50 euros nos separan de pagar 600 euros por 70 metros cuadrados en Santoña de los 550 euros por 75 metros en la playa de Suances. Lo mismo ocurre en Asturias, donde un poco más, exactamente 100 euros, separan de disfrutar de 50 metros en Ribadesella a 45 metros cuadrados en Tapia de Casariego", añade.

En Galicia, lo más barato

Por el contrario, si decidimos irnos al País Vasco o a Galicia, la oferta de precios se amplía enormemente y así podemos veranear en Hondarribia en Guipúzcoa por 1.440 euros en 110 metros cuadrados o en el centro de San Sebastián por 1.360 euros en un apartamento de 55 metros. Si queremos irnos a una franja más económica, en Vizcaya encontramos en Gorliz 100 metros cuadrados por 480 euros y por unos 100 euros más conseguimos 70 metros cuadrados en Ondarroa.

Precios más caros podemos conseguir en la comunidad gallega, y más concretamente en Pontevedra, donde en O Grove (Isla de La Toja) y en Sanxenxo en Portonovo se van a pagar 1.800 y 1.550 euros respectivamente por superficies en torno a los 100 metros. "Resulta paradójico que en esta comunidad también nos encontramos los precios más económicos del mercado, entre 210 y 250 euros en Burela y Vicedo en Lugo", apunta José María Basañez.

En Baleares, depende de la isla

Tal y como explica Basañez, "la gran afluencia de turismo, tanto nacional como internacional, convierte las Islas Baleares en un foco de atención inmobiliario que en muchos casos hace imposible encontrar un apartamento libre. Por ello, la elección de la isla puede ser una salida adecuada si nuestro presupuesto no se quiere disparar".

Encontrar algo por debajo de los 1.000 euros semanales, según TecniTasa, es posible, aunque hay que buscar con más insistencia. En Menorca, en Port Addaia, se pueden conseguir 65 metros cuadrados por 775 euros, y en Palma de Mallorca en Calviá, por 800 euros podemos optar a 60 metros cuadrados en Magaluf. Pero lo normal es superar la barrera de los 1.000 euros.

Así, en el puerto de Ibiza se pagan 1.800 euros semanales por 100 metros y en la misma isla, en Sant Josep Sa Talaia, por los mismos metros hay que desembolsar 1.500 euros. Si pasamos a Palma de Mallorca, los precios tienen una línea similar y podemos acceder a una estancia de 100 metros cuadrados por 1.600 euros en Andratx. Finalmente, en Port de Pollensa, por 85 metros el importe semanal es de 1.575 euros.

El Mediterráneo, ¿más asequible?

La costa mediterránea nos da un amplio abanico de ofertas para alquilar en primera línea de playa desde Cataluña hasta Murcia pasando por la Comunidad Valenciana. En la costa catalana, la horquilla de precios se duplica, ya que podemos hacernos con un alquiler de 750 euros en primera línea de playa en Calafell, Tarragona, hasta casi el doble del importe (1.400 euros) en Sitges, en Barcelona. Entre medias, la oferta es extensa, pasando por los 900 euros en Castell-Platja d’Aro o los 1.200 euros de Cadaqués, ambos en Girona.

La costa mediterránea nos da un amplio abanico de ofertas para alquilar en primera línea de playa, desde Cataluña hasta Murcia

"En la Comunidad Valenciana, conseguimos alquileres para bolsillos un poco más modestos", destaca Fernando García-Marcos. De esta forma, un apartamento de 70 metros cuadrados en la playa de Levante de Benidorm (Alicante) se consigue por 780 euros semanales, y por un poco de menos dinero (750 euros), los mismos metros en el paseo marítimo de Peñíscola, en Castellón.

En la franja más económica en la zona de El Saler, en Valencia, podemos optar a 80 metros cuadrados por tan solo 380 euros, y por 20 euros más (400 euros) puedes alquilar en Moncófar (Castellón) un apartamento en primera línea y pasar siete días con el sol asegurado.

En la Comunidad Murciana, en Mazarrón, San Javier o Cartagena, se consiguen apartamentos de 60 metros cuadrados desde 525 a 650 euros, pero los precios más altos los encontramos en Águilas, en la Isla del Fraile, por 850 euros, aunque la superficie es de 140 metros cuadrados.