Los hipotecados durante la burbuja, de nuevo, los más afectados por los desahucios

Aquellas familias que compraron casa y se hipotecaron entre 2005 y 2008, en plena burbuja inmobiliaria, sigue siendo los más afectados por las ejecuciones hipotecarias. Muchas de ellas compraron con los precios de las viviendas en máximos históricos y con financiación por el 100% de la vivienda lo que provocó que, cuando estalló la crisis y se vieron en dificultades para pagar la hipoteca, la venta del inmueble no fuera suficiente para cubrir la deuda contraída con el banco.

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A pesar de que las ejecuciones hipotecarias se han ido reduciendo significativamente durante los últimos años, casi el 60% de los procedimientos iniciados afectan a quienes compraron casa entre esos años. Así lo muestran los datos del Instituto Nacional del Estadística (INE) que hoy ha publicado el número de inscripciones de certificaciones por ejecuciones hipotecarias iniciadas sobre vivienda habitual durante el primer trimestre de 2019. La cifra bajan un 27,4% hasta 1.490 procedimientos, de los cuales, el 59,9% corresponde a hipotecas constituidas entre 2005 y 2008. También cae el número de certificaciones respecto a las viviendas que no son residencia habitual de los propietarios. En concreto, la cifra durante los tres primeros meses del año se situó en 528, un 14,8% menos que un año antes.

La mejora de la situación económica, la recuperación del empleo, el aumento de las daciones en pago o la paralización de numerosas ejecuciones hipotecarias por parte de los jueces españoles en diferentes ocasiones a la espera del pronunciamiento del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) sobre diferentes cláusulas abusivas (vencimiento anticipado, IRPH, cláusulas suelo, etc), explican, en parte, este importante descenso en las cifras.

Los datos del INE revelan cómo las ejecuciones hipotecarias sobre viviendas concentran el 50,1% del total de ejecuciones hipotecarias en el primer trimestre de 2019.
El 10,2% del total de ejecuciones hipotecarias son viviendas habituales de personas físicas. El 36,3% corresponde a viviendas de personas jurídicas (un 29,6% superior al de primer trimestre de 2018) y el 3,6% a otras viviendas de personas físicas (un 14,8% inferior al del primer trimestre de 2018).

Por su parte, las ejecuciones hipotecarias de otras urbanas (locales, garajes, oficinas, trasteros, naves, edificios destinados a viviendas, otros edificios y aprovechamientos
urbanísticos) suponen el 37,5% del total. Por otro lado, el 22,9% de las ejecuciones hipotecarias en el primer trimestre son sobre viviendas nuevas y el 77,1% sobre usadas, si bien, el número de ejecuciones hipotecarias sobre viviendas nuevas aumenta un 49,2% en tasa anual y el de usadas un 0,1%.