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Bitango, obligada a paralizar una promoción en Fuenlabrada por impago a la constructora
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Bitango, obligada a paralizar una promoción en Fuenlabrada por impago a la constructora

Bitango, la promotora que vende viviendas protegidas a futbolistas del Real Madrid como Iker Casillas y Fernando Hierro, sigue acumulando irregularidades. La última es la paralización

Foto: Bitango, obligada a paralizar una promoción en Fuenlabrada por impago a la constructora
Bitango, obligada a paralizar una promoción en Fuenlabrada por impago a la constructora

Bitango, la promotora que vende viviendas protegidas a futbolistas del Real Madrid como Iker Casillas y Fernando Hierro, sigue acumulando irregularidades. La última es la paralización de su promoción Campus de Fuenlabrada III porque no paga a la constructora, a la que debe más de 1,5 millones de euros, según documentos de la empresa a los que ha tenido acceso este diario.

Dicha constructora decidió el pasado 15 de junio “cesar todas las tareas de edificación en la obra sita en Fuenlabrada, Plan Parcial sector PPI-7, previa comunicación a la comunidad de propietarios y a la empresa gestora [Bitango], con quien tenemos relación contractual, por incumplimiento de los pagos pactados en dicho contrato”, según una nota de prensa. La comunicación finaliza con la advertencia de que “nuestros servicios jurídicos están preparando la correspondiente vía judicial por si fuere preciso”.

Fuentes de la constructora consultadas han asegurado a El Confidencial que “después de reiterados avisos no cobramos desde el mes de abril, por lo que hemos decidido parar de trabajar”. Las dos sumas pendientes de pago ascienden, exactamente, a 1.591.609 euros. Portavoces de Grupo Bitango consultados reconocen la demora de dos certificaciones y aseguran que “están en proceso de tramitación”. Para más inri, el fin de obra debía ser el pasado mes de mayo.

El estado de ánimo del centenar de propietarios de los pisos de Campus de Fuenlabrada III es de lógica preocupación, pues sus viviendas penden de un hilo. Ante la posibilidad de que la cuenta de la comunidad de propietarios se encuentre sin fondos, los vecinos han intentado sin éxito verificar las cantidades. En CajaMar, una de las entidades con las que trabaja Bitango, no ofrecen datos a los propietarios sin la firma del dueño de Bitango, Jesús Rey. Rúbrica que, a día de hoy, aún no han obtenido.

No es la primera vez que los afectados de Bitango manifiestan dudas sobre el mercadeo de las viviendas protegidas de la Comunidad de Madrid que preside Esperanza Aguirre. La Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio del Gobierno regional ha recordado a este diario que, hasta la fecha, “se han tramitado 140 expedientes sancionadores, de los cuales 90 ya están en la fase de resolución con sanción. Esto es, devolución de cantidades indebidas por sobreprecio más sanción administrativa”.

Como quiera que Bitango ha recurrido todos los expedientes, desde la Comunidad de Madrid no saben cuándo se terminarán de resolver. “No hay mecanismos para acelerar el proceso”, confiesan. De las irregularidades de Fuenlabrada, la Comunidad no tenía conocimiento.

Cambio de nombre y actividad

Recientemente, Bitango ha cambiado de nombre y de actividad: ahora se llama Grupo Bitango y en vez de gestionar viviendas de protección pública, ha entrado de lleno en la promoción de centros comerciales. Su segundo proyecto, de una superficie de 9.103 metros cuadrados, se ubica en una zona que conoce muy bien: Arroyomolinos. Las residencias sometidas a protección que Bitango ha promovido en esta zona se asientan sobre un vasto terreno que perteneció a la familia Franco. Suelo que Rey compró a Edificaciones Tifán, sociedad del imputado en el Caso Malaya, Fidel San Román.

Bitango, la promotora que vende viviendas protegidas a futbolistas del Real Madrid como Iker Casillas y Fernando Hierro, sigue acumulando irregularidades. La última es la paralización de su promoción Campus de Fuenlabrada III porque no paga a la constructora, a la que debe más de 1,5 millones de euros, según documentos de la empresa a los que ha tenido acceso este diario.