Un hombre salva su vida después de que su iPhone sea capaz... ¡de parar una flecha!

Miércoles 13 de marzo de 2019: un hombre de 43 años regresa a su casa poco después de las 09:30 en Nueva Gales del Sur (Australia), pocos minutos después de haber dejado a su hijo en el colegio. Tras aparcar en la calle, observa que junto a su puerta hay un bulto extraño: cuando se aproxima algunos metros, descubre que se trata de un hombre armado con un arco y con flechas, que está intentando forzar la cerradura, presumiblemente para entrar a robar.

En ese momento, el hombre que se dirigía tranquilamente a su casa decide que no tiene sentido enfrentarse a un hombre armado, pero antes de avisar a las autoridades toma una decisión que, a la postre, terminaría por salvarle la vida. Saca su teléfono móvil del bolsillo y decide grabar un vídeo al asaltante, con el objetivo de presentarle a las autoridades una prueba con la que explicar lo que estaba pasando junto a la puerta de su casa.

TE PUEDE INTERESAR

¿Dónde está Crystal? Una joven vuelve a casa 20 años después (y explica por qué se fue)

Rubén Rodríguez

El hombre comienza a grabar pero, escasos segundos después, la situación cambia radicalmente. El asaltante, que no es capaz de forzar la cerradura, decide intentar buscar otra vía para acceder al interior de la casa. Es en ese momento en el que se da cuenta de que alguien a escasos 25 metros de él le está grabando con un móvil, por lo que decide cargar una flecha en su arco, tensar la cuerda, apuntarle y dispararle con la intención de matarle.

A través de la pantalla de su móvil, el hombre ve atónito cómo se aproxima la flecha y, sin tiempo para reaccionar, levanta la mano en la que tiene su iPhone en un gesto completamente institivo... pero no sabía que la fortuna iba a estar de su lado. La flecha impacta directamente contra el móvil, atravesándolo de un lado a otro, pero el aparato electrónico consigue frenar por completo la fuerza del artefacto, que solo lacera mínimamente la barbilla del hombre.

Aterrado, decide montarse en su vehículo y huir en dirección a la comisaría más cercana, donde denuncia lo ocurrido, evidentemente sin poder mostrar las imágenes de su móvil al quedar destrozado por la flecha. Las autoridades salen en busca del agresor, al que localizan escasos minutos después en la calle, todavía armado con su arco: le detienen y le acusan de "armarse con la intención de cometer un delito, ocasionando daños físicos y materiales".

Ese hombre que regresaba a su casa tranquilamente le debe la vida, literalmente, a su iPhone, que fue capaz de detener la flecha antes de que impactara directamente contra su cara. Los escasos cinco centímetros que consiguieron salir por el lado de la pantalla del teléfono, arratrando consigo el cristal templado que protegía el dispositivo, solo le provocaron un pequeño arañazo en su cara. Eso sí, no sabemos si Apple cubre los daños por ataque con flecha.