El mejor regalo de cumpleaños: un uniforme y una tarta con forma de camión de basura

Su sueño no es ser futbolista, médico ni veterinario. Eduardo de Campos quiere ser basurero, y lo tiene claro desde hace tiempo. Su madre cuenta que todos los fines de semana corre a la ventana para ver pasar el camión que va recogiendo los desperdicios generados por los vecinos de su barrio: Tatuquara de Curitiba, en Brasil. Así lo ha dejado saber a la web Banda B., a quien Rose –como así se llama la mujer– también ha narrado el enfado de su hijo si los basureros pasan y no le saludan.

Tal es su afición por esta profesión que el de este año ha sido el mejor cumpleaños de toda su –corta– vida. Los empleados de Cavo, la empresa de basuras que opera en su vecindad, se enteraron del amor de Eduardo por su trabajo y le obsequiaron con el regalo que más ilusión podía hacerle: un uniforme de recogida de basuras hecho a medida y una vuelta por su barrio subido en el camión.

La propia empresa hizo público el regalo a través de su cuenta de Facebook, desde donde también informó de que el pequeño no dudó en ponerse manos a la obra y ayudó recogiendo algunas bolsas de desperdicios. La tarta de cumpleaños, como no podía ser de otra manera, tenía la forma de un camión de recogida. “Eduardo, felicidades por comprender desde pequeño que todas las profesiones son dignas y merecen respeto”, escribió Cavo en homenaje al joven.

“A pesar de ser tan pequeño, tiene una conciencia ambiental enorme: se preocupa por cuidar la ciudad y dejar todo limpio”, aseguró Rodrigo Rodrigues, uno de los empleados de la empresa de basuras. “Nos alegra saber que reconoce nuestro trabajo de esta manera”, concluyó.