Rechaza que le laven el cristal en un semáforo y esta rumana le hace un calvo

Lo que vais a ver es una escena de ordinaria incivilidad en Roma vivida esta semana. Una conductora se para en un semáforo y espera a que se ponga en verde. Es la hora de comer. Como cada día una mujer rumana se acerca para intentar limpiar el cristal de su coche, pero ella rechaza de nuevo sus servicios. Sin embargo, cansada de sufrir cada día este tipo de acosos en el semáforo, decide coger el teléfono para grabar al grupo de inmigrantes apostado en esta zona.

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Una de ellas se da cuenta, sonríe desde lejos y decide provocarla. Se acerca a la ventana y como si no pasara nada, se baja los pantalones mostrando el trasero en mitad de una carretera muy transitada y delante de los ojos de incrédulos viandantes. Después, satisfecha, vuelve con sus amigos.

El vídeo grabado por Alessandra Scarpa, funcionaria de este municipio italiano, ha sido publicado en Facebook con el siguiente comentario: "No podemos aceptar que en Roma se viva fuera de la ley habiendo ciudadanos honestos. A dónde hemos llegado. Es una vergüenza. ¿Esta es la imagen que queremos dar de Roma.? Ayer en esa calle había turistas de paseo y madres con niños y cada día tenemos que vivir con estos ataques. Basta ya.".

El vídeo ha recibido miles de reproducciones en las redes sociales suscitando muchos comentarios sobre la situación de los grupos de inmigrantes rumanos en Roma. En este sentido, en El Confidencial, hace pocos meses publicamos varias informaciones en las que se ponían de manifiesto el incremento de las situaciones racistas en la capital italiana entre los locales y grupos de extranjeros.