El zoo de Bristol trae al mundo al primer bebé de gorila nacido por cesárea en sus instalaciones

“Cualquier nacimiento de un gorila es un evento extraño y emocionante, pero el nacimiento de un bebé gorila por cesárea es aún más inusual”. Así de apasionado se muestra John Partridge, uno de los cuidadores del zoo londinense de Bristol que se hará cargo del nuevo primate que engrosa la particular 'arca de Noé' de este lugar. La gorila, una hembra ya sin ningún problema de salud, aún no está visible al público porque se está recuperando de las dificultades para respirar que tuvo al nacer.

Lo llamativo de la noticia es que su llegada al mundo, datada el 12 de febrero, tuvo lugar por cesárea ante la posible preeclampsia de Kera –la madre–. Este estado patológico se define con hipertensión arterial y presencia de proteínas en la orina, entre otras cosas, algo que podría haber derivado en un parto fallido que hubiera acabado con la vida de la bebé. Ante el riesgo que corrían ambas gorilas, los veterinarios decidieron someter a la madre a una cesárea que relajara el nivel de peligrosidad del nacimiento.

“Después del nacimiento de mis propios hijos, este es probablemente uno de los mayores logros de mi vida y algo que seguro nunca olvidaré”, dijo el doctor David Cahill, encargado de la intervención. La emoción del experto se entiende al recordar que ésta fue la primera vez que el doctor ayudaba al nacimiento de un gorila venido al mundo por cesárea.

La pequeña primate nació con un peso de poco más de un kilo, y en el vídeo publicado por la cuenta de Facebook del zoo de Bristol pueden verse algunas escenas de cómo fue su parto. En las imágenes se aprecia cómo los veterinarios le proporcionan los cuidados necesarios para suplir sus problemas respiratorios e incitan a sus pulmones a funcionar a través de movimientos sobre el pecho.