El tobogán casero más largo del mundo: un recorrido de 30 segundos de caída

¿Quién no ha disfrutado como un niño dejándose caer por un tobogán? Pendientes inclinadas, construidas en metal, en plástico o que desembocan en una piscina son algunos de los ejemplos que hacen las delicias de grandes y pequeños. Tan es así que una adulta –la australiana Kirsty Mc Kavanagh– ha compartido un vídeo en el que hace realidad el sueño de los aficionados a la diversión: un tobogán gigante en mitad de la naturaleza.

En la grabación, publicada en Facebook, puede verse a la familia y amigos de la autora deslizarse por un recorrido trazado con plásticos negros sobre los que corre el agua. Melinda Eliassen es una de las 'valientes' que se animan a dejarse llevar por la corriente durante nada menos que medio minuto: 30 segundos en los que la mujer se zarandea hacia derecha e izquierda durante su camino con el resultado de varios moratones leves en sus piernas.

Los usuarios de la red de Zuckerberg han acogido tan calurosamente este vídeo –desde que se publicó el 23 de enero, ha sido visto por más de 4,3 millones de personas– que McKavanagh ha creado un perfil ex profeso para colgar otras grabaciones similares a la que tuvo lugar sobre el césped de una parcela familiar.

Debido al éxito conseguido, algunos usuarios ya han pensado en sacar provechoeconómico a la atracción ubicada en Queensland. “Vas a tener que empezar a cobrar, se ha hecho viral. Habrá gente que vaya desde otros países el año que viene para probar el tobogán”, afirman.