Alójate en este rincón de España: un mítico balneario que se renueva con las nuevas tecnologías para reinventar el bienestar

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En Galicia, un histórico balneario gallego —referente del termalismo y del turismo de bienestar— iniciaba una nueva etapa para mejorar la experiencia de spa con tecnología avanzada y una puesta al día de sus espacios. Este icono del relax, con 150 años de legado, ha renovado su propuesta de salud a través del agua, reforzando conceptos clave como 'balneario en Galicia', 'aguas mineromedicinales' y 'bienestar' en un entorno pensado para desconectar y cuidarse.

Se trata del Balneario de Mondariz, fundado en 1873 por los hermanos Peinador, que ha actualizado su emblemático Palacio del Agua con nuevas zonas de camas de hidromasaje, cuellos de cisne, chorros jet en tres alturas, una gran cascada descontracturante, géiser plantar, bancos lumbar aire-agua, espacios de jacuzzi y nado contracorriente, además de una 'seta' central. El spa supera los 3.000 m² e integra piscina interactiva, áreas de descanso, saunas, pediluvio y una piscina zen al aire libre con vistas a la Fuente de Gándara, consolidando un circuito termal puntero para una escapada de relax en Galicia.

Agua mineromedicinal y balneoterapia de vanguardia

El corazón de la experiencia sigue siendo el agua mineromedicinal —bicarbonatada, carbogaseosa y ferruginosa—, fundamento de tratamientos que combinan tradición y vanguardia para cuidar la salud y la piel. Sus propiedades, ligadas a efectos antioxidantes y antiinflamatorios, resultan valiosas en programas de bienestar y en terapias de apoyo para afecciones crónicas reumatológicas, respiratorias, dermatológicas o digestivas, con impacto positivo en la recuperación física y emocional del visitante. Además, la carta de baños especializados —desde hidromasajes tonificantes hasta opciones de CO₂ o circuitos con alto número de salidas a presión— multiplica las sensaciones y refuerza los beneficios del termalismo gallego.

El complejo integra, asimismo, un hotel de cuatro estrellas con 194 habitaciones distribuidas en tres edificios históricos comunicados, campo de golf y diversos espacios de restauración para una estancia completa, también con área infantil y propuestas pensadas para familias, eventos y celebraciones. Todo ello, sin perder la esencia de un destino que inspiró la moda de los spas en España y que no para de reinventarse para el viajero que busca spa en Galicia, relax en un palacio del agua y programas de salud con enfoque contemporáneo, manteniendo el carácter pionero y la excelencia que lo han convertido en un clásico del bienestar europeo.