Descubre la joya de las Rías Baixas en Galicia: un pueblo marinero capital del Albariño

• La ciudad de España Patrimonio de la Humanidad que la Unesco define como “una de las zonas urbanas de mayor belleza del mundo”
• Sigue a El Confidencial en Google Discover para enterarte de todas las noticias

Entre bodegas centenarias, pazos de piedra y el murmullo del mar, se esconde una de las villas más encantadoras de Galicia. Un lugar donde el vino, la historia y la tradición marinera se funden para ofrecer una experiencia única en las Rías Baixas.

Una joya gallega entre viñedos y mar

En el corazón de las Rías Baixas, en la provincia de Pontevedra, se levanta la villa marinera de Cambados, considerada la capital del Albariño. Su ubicación privilegiada, en la comarca de O Salnés y junto a la ría de Arousa, le confiere un paisaje donde los viñedos se mezclan con los reflejos del Atlántico. El viajero que la descubre se encuentra con un auténtico museo al aire libre, donde cada rincón guarda una historia ligada al mar y al vino. Sus calles empedradas y plazas señoriales, rodeadas de pazos y casas blasonadas, reflejan siglos de esplendor y tradición gallega.

Además de su valor patrimonial, Cambados es un referente del enoturismo en Galicia. Las bodegas locales, muchas de ellas familiares, abren sus puertas a quienes desean conocer el proceso de elaboración del vino Albariño, Denominación de Origen Rías Baixas. Su célebre Fiesta del Albariño, declarada de Interés Turístico Nacional, atrae cada verano a miles de visitantes que celebran la cultura vinícola entre degustaciones, música y gastronomía marinera. Aquí, el vino no solo se bebe: se vive y se comparte como símbolo de identidad y orgullo local.

La villa combina su herencia aristocrática con el carácter acogedor de su gente. Entre los lugares más emblemáticos destacan las ruinas de Santa Mariña Dozo, declaradas Bien de Interés Cultural; el Pazo y la Plaza de Fefiñáns, joya arquitectónica del siglo XVII; y la Torre de San Sadurniño, vestigio de las defensas medievales frente a las incursiones normandas. Tampoco faltan el Parador de Cambados, antiguo Pazo de Bazán, ni el mirador de A Pastora, desde donde se divisa la ría y la vecina Illa de Arousa. Cada parada ofrece una postal distinta de la Galicia más auténtica.

Quienes prefieren disfrutar de la naturaleza pueden recorrer la Ruta da Pedra e da Auga, un sendero entre molinos y riachuelos que enlaza Cambados con el monasterio de Armenteira. En el paseo marítimo, los aromas del marisco recién cocido acompañan la brisa salina que envuelve los puertos pesqueros y los cruceros de piedra. Esta fusión de mar, vino y cultura convierte a Cambados en una visita imprescindible para quienes buscan la esencia más genuina de las Rías Baixas.