El castillo medieval más elegante de Aragón que fue palacio de arzobispos y hoy se puede visitar
Construido sobre una colina del Matarraña, este castillo de origen medieval destaca por su arquitectura gótica, su historia episcopal y sus espectaculares vistas del valle
Dominando el perfil de uno de los pueblos más pintorescos del interior de Teruel, un castillo de piedra caliza se alza como emblema del patrimonio aragonés. Su silueta almenada, visible desde la ribera del río Matarraña, evoca los siglos de esplendor en los que Aragón consolidaba su poder político y religioso. Hoy, esta fortaleza restaurada combina historia, arte y una cuidada oferta de visitas para viajeros que buscan experiencias auténticas en el corazón del Matarraña.
El Castillo de Valderrobres, declarado Bien de Interés Cultural desde 1931, tiene su origen a finales del siglo XII, cuando se levantó una torre defensiva que siglos después sería transformada en un palacio episcopal. Durante las prelaturas de García Fernández de Heredia y Dalmau de Mur y Cervellón, arzobispos de Zaragoza, el edificio adquirió su aspecto gótico actual, más palaciego que militar, con amplios ventanales, escudos heráldicos y un patio interior que revela el poder eclesiástico que gobernó la villa durante siglos.
🏰 En el corazón del Matarraña, el castillo de Valderrobres combina historia y elegancia. Construido en el s. XIV por los arzobispos de Zaragoza, fue más palacio que fortaleza. Hoy sigue deslumbrando con su esplendor gótico.https://t.co/Fqs9tDkyRV#CastillosDeAragón… pic.twitter.com/O9ZQTfBcKo
El edificio, construido con sillares extraídos de la misma roca sobre la que se asienta, conserva estancias como la Sala de los Leones, la Cámara Dorada, la cocina y las caballerizas. También se aprecia un pasadizo elevado que lo conecta con la iglesia de Santa María la Mayor, conformando uno de los conjuntos góticos más notables de Aragón. Desde los años ochenta se han llevado a cabo intensas labores de restauración, culminadas en 2021, que han permitido recuperar bóvedas y galerías con tracería original.
Hoy, el castillo acoge exposiciones, congresos y conciertos, consolidándose como un espacio cultural abierto al público. Los visitantes pueden elegir entre recorrido libre, audioguía o visita guiada. Las entradas cuestan 8 euros para adultos y 6 euros para mayores de 65 años y niños de entre cuatro y once, disponibles únicamente en efectivo en el Museo de Valderrobres, situado junto a la iglesia, a los pies de la fortaleza.
Más allá de su valor arquitectónico, el castillo ofrece una panorámica inigualable del valle y del casco histórico de Valderrobres, incluido entre Los Pueblos Más Bonitos de España. Pasear por sus calles empedradas hasta alcanzar la plaza de armas es una forma de conectar con un legado que combina la sobriedad medieval y la elegancia gótica que aún hoy definen al Matarraña como una de las joyas patrimoniales de Aragón.
Dominando el perfil de uno de los pueblos más pintorescos del interior de Teruel, un castillo de piedra caliza se alza como emblema del patrimonio aragonés. Su silueta almenada, visible desde la ribera del río Matarraña, evoca los siglos de esplendor en los que Aragón consolidaba su poder político y religioso. Hoy, esta fortaleza restaurada combina historia, arte y una cuidada oferta de visitas para viajeros que buscan experiencias auténticas en el corazón del Matarraña.