Así es el palacio asturiano del siglo XVI convertido en hotel 'boutique' en plena Comarca de la Sidra: está en uno de los pueblos más bonitos de España

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Un antiguo palacio del siglo XVI, ubicado en el corazón de la Comarca de la Sidra, se ha transformado en un exclusivo hotel boutique que hoy deslumbra a los viajeros. Su historia, sus vistas a los Picos de Europa y al mar Cantábrico y su reconocimiento internacional lo convierten en uno de los alojamientos más singulares de Asturias.

El hotel mantiene todo su legado histórico y cultural perfectamente combinado con el lujo de las comodidades contemporáneas

Se trata del Palacio de Luces, en el concejo de Colunga, a escasos minutos de Lastres, catalogado entre los pueblos más bonitos de España. Entre la Sierra del Sueve y el mar, este edificio renacentista fundado por el hidalgo Juan Victorero "El Viejo" ha pasado de casona indiana a destino de lujo, sin renunciar a su esencia histórica.

De casona indiana a hotel de lujo

Construido en 1580, el palacio conserva su impronta original gracias a una restauración que ha respetado piedra, madera y detalles de época. Hoy forma parte de Small Luxury Hotels of the World y es el único alojamiento del Principado que ostenta una Llave Michelin, símbolo de excelencia en el sector. El Palacio de Luces pertenece al prestigioso grupo hotelero Cool Rooms, una joven cadena fundada en 2018 que se ha consolidado por transformar edificios históricos en alojamientos de lujo.

Sus 44 habitaciones ofrecen vistas a la bahía de Lastres, la sierra del Sueve y los Picos de Europa

El complejo está formado por cuatro edificios de diferentes épocas, donde se combinan muebles restaurados, colores neutros y diseños a medida que dialogan entre pasado y presente. Sus 44 habitaciones, distribuidas entre el palacio original y un anexo moderno, ofrecen vistas a la bahía de Lastres, la sierra del Sueve y los Picos de Europa. Destacan por su decoración inspirada en los colores del entorno —tonos suaves que evocan las verdes praderas, la bruma del mar o los ocres del atardecer—, y está amueblada con comodidades actuales al estilo boutique, creando un ambiente elegante y a la vez cálido. Además de su restaurante, hay un bar lounge más informal, La Palmera Gastrobar, ideal para tapas, cócteles, así como desayuno servido a la carta, y complementado por servicio de habitaciones (room‑service) durante todo el día.

Una experiencia que va más allá del descanso

El hotel cuenta con espacios concebidos para la desconexión: jardines, murallas de piedra y un área de bienestar con piscina climatizada, sauna, baño turco (hammam), duchas sensoriales, tumbonas térmicas y un gimnasio equipado con Technogym de última generación para cuidar cuerpo y mente sin renunciar a la elegancia. El spa es ideado como un santuario de bienestar donde la filosofía de ALQVIMIA, la reputada casa española de alta cosmética natural y holística, se fusiona con los espacios más refinados de relajación. Aquí, la belleza se cultiva desde la raíz: cada tratamiento —desde aromaterapia hasta kinesiología— se ajusta con precisión a las necesidades de quien lo recibe, equilibrando canales energéticos con ingredientes 100 % naturales y productos eco‑sostenibles.

A la oferta se suman servicios como aparcamiento gratuito—sin necesidad de reserva—, cargadores para vehículos eléctricos (tipo Tesla), habitaciones adaptadas, recogida en el aeropuerto y zonas de relax con vistas al entorno. Todo ello convierte al Palacio de Luces en un auténtico hotel-destino, pensado tanto para el descanso como para eventos.

Sabores de Asturias y productos de temporada

La gastronomía tiene un lugar protagonista en el restaurante Tella, dirigido por el chef Francisco Ruiz. Su cocina parte del recetario asturiano —con productos de proximidad como el pitu pintu de Colunga o la fabada IGP— y se enriquece con influencias americanas, en homenaje al espíritu indiano de su fundador. Una propuesta que destaca por el respeto al producto, la estacionalidad y una creatividad que dialoga con la memoria del lugar.

Tella propone un menú degustación de verano 2025 con un recorrido gastronómico que fusiona tradición asturiana y toques creativos

Tella propone un menú degustación de verano 2025 con un recorrido gastronómico que fusiona tradición asturiana y toques creativos. La experiencia comienza con aperitivos del chef y un risotto de ostra ecológica del Eo con trufa, seguido de entrantes como el pulpo a la brasa con mole de su jugo, carpaccio de bonito del Cantábrico marinado en achiote y un guiso de colmenillas y foie con yema de corral. En los platos principales destacan la raya de Lastres con mantequilla cítrica e hinojo a la brasa, además de la caldereta de cordero Xaldu con verduras al curry rojo y pan de yogur y menta. Los postres sorprenden con combinaciones como arroz, coco y mango, junto al maíz a la brasa con chocolate de Guayaquil, palomitas y salsa mole. El menú se ofrece a mesa completa, con un precio de 89 euros (IVA incluido, sin bodega) y opción de maridaje por 35 euros por persona.

La Comarca de la Sidra, un marco incomparable

El entorno multiplica la experiencia: rutas por la Sierra del Sueve, paseos por Lastres o visitas a llagares donde se elabora sidra de forma artesanal. El viajero encuentra así no solo un hotel, sino la puerta de entrada a una Asturias auténtica, de tradición marinera y paisajes que permanecen intactos. Un destino que conecta al visitante con la esencia más genuina de la Comarca de la Sidra.

El Palacio de Luces demuestra que el lujo no siempre reside en la ostentación, sino en la armonía con el territorio. Quien lo visita no solo descansa: se lleva consigo una manera distinta de habitar Asturias, entre historia, naturaleza y hospitalidad. Un refugio que invita a volver una y otra vez para reencontrarse con lo esencial.