Por qué las Lagunas de Ruidera (todavía) no están llenas, a pesar de las lluvias: este será el mejor mes para visitarlas

"¿Por qué están las lagunas tan vacías si no ha parado de llover en los últimos meses?", pregunta Alejandro a Tomás, guía de Ecoturismo Ruidera, en una excursión a la cueva de Montesinos, donde soñó el ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha. "Si he guiado 40 visitas a la cueva esta semana, 40 personas me han preguntado lo mismo", responde Tomás.

Llama la atención, después de tanta lluvia, ver que las Lagunas de Ruidera no están llenas en el mes de mayo, sino más bien todo lo contrario. En la Redondilla se puede apreciar, especialmente, la sequía. La redonda laguna ha vivido momentos mejores, de mucha más abundancia de agua. ¿A qué se debe esto? Si el nivel de los embalses en España ha aumentado notablemente tras las abundantes lluvias, ¿por qué no ha sucedido lo mismo en las 15 lagunas que forman el Parque Natural de las Lagunas de Ruidera?

La culpa la tiene el Acuífero 24. Este acuífero también es el culpable de que en épocas de sequía las lagunas no se queden sin una gota de agua. El Acuífero 24, también conocido como acuífero de la Mancha Occidental, es uno de los mayores acuíferos de España. Abarca parte de las provincias de Ciudad Real, Albacete, Cuenca y Toledo, y está compuesto principalmente por materiales carbonatados (calizas y dolomías) del Mioceno y materiales detríticos (arcillas, arenas y limos).

Cuando llueve, asegura Tomás, el agua se filtra a través del terreno hasta el acuífero. Cuando el nivel de esta agua subterránea sube lo suficiente, el acuífero se desborda por puntos de surgencia, llegando a la superficie en forma de manantiales, arroyos o filtraciones, alimentando las lagunas. Es por eso que las consecuencias de las lluvias no se reflejan inmediatamente en el nivel de las lagunas. No obstante, donde sí que son visibles es en el verde de la vegetación que les rodea.

Es más, Tomás explica en su visita a la cueva que los mejores meses para ver las lagunas este año, en 2025, serán septiembre, sobre todo, y octubre; aunque no llueva en todo el verano. Sin embargo, insiste, "la naturaleza es impredecible".

Las Lagunas de Ruidera merecen una visita

Este enclave natural único recibe cada año más de 500.000 visitantes. Esta enorme cantidad de turistas hace que a los numerosos bares y restaurantes que hay alrededor de las lagunas no les falten clientes. Hasta allí se puede llegar en coche sin problema.

El Parque Natural se compone de 15 lagunas (la Blanca, Conceja, Tomilla, Tinaja, San Pedro, Redondilla, Lengua, Salvadora, Santos Morcillo, Batana, Colgada, Laguna del Rey, Cueva Morenilla, Coladillay Cenagosa), algunas más pequeñas, otras más impresionantes... Sin duda, una de las más llamativas es la Colgada, sobre todo cuando hay tal cantidad de agua que cae por sus cascadas.

Aunque los turistas que quieran disfrutar de una cascada por la que siempre circula el agua deberían visitar la cascada del Hundimiento. Esta, que es el mayor salto del parque, se encuentra a diez minutos caminando desde el pueblo de Ruidera. Además, se puede contemplar y fotografiar desde un cómodo mirador de madera.

Los planes para quienes se acerquen hasta este Parque Natural son de lo más variados y aptos para todos los públicos; ya que pueden ir desde grandes comilonas en uno de los restaurantes a los pies de alguna de las lagunas hasta senderismo por las diferentes rutas que las bordean. También pueden visitarse, como hizo Alejandro, la cueva de Montesinos (habiendo concertado la excursión con alguna empresa de la zona), el Castillo de Rochafrida, el Castillo de Peñarroya, el baño de las Mulas y la localidad de Ossa de Montiel, donde se encuentra la Iglesia de Santa María Magdalena.

Así mismo, los turistas que levanten la vista, con un poco de fortuna, podrán observar aves como el aguilucho lagunero.

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Turismo activo y de aventura

Para los viajeros más aventureros, Ruidera también oferta un amplio abanico de opciones, desde rutas en kayak por las lagunas hasta paintball, rutas a caballo o buceo. Son muchas las empresas que operan en la zona y ofrecen actividades de este tipo a quienes quieren, no solo pasear por las lagunas, sino también participar en actividades más complejas.

Otras de las actividades que se encuentra en auge es el paddle surf, que puede llevarse a cabo en las lagunas de mayor superficie. El senderismo y el ciclismo de montaña son otras de las actividades que nunca fallan entre los más deportistas.

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Este paraje natural sigue sorprendiendo a quienes piensan en Castilla-La Mancha como un lugar seco y árido. Lo es, pero no al completo, tiene zonas, como el parque formado por estas 15 lagunas, que recuerdan al norte de España, y más en años como este en el que la lluvia ha sido una de las grandes protagonistas durante los meses de marzo y abril.