El infravalorado pueblo que debería ser Patrimonio de la Humanidad, según los expertos: uno de los entornos medievales más bonitos de España

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España atesora rincones de belleza inigualable donde la historia ha dejado su huella en cada piedra. Existe un pueblo cuya fisonomía medieval y riqueza monumental han cautivado a expertos y visitantes, quienes consideran que debería ser reconocido como Patrimonio de la Humanidad. Rodeado de espacios naturales protegidos y tradiciones ancestrales, este enclave sigue siendo una joya aún por descubrir en el listado de la Unesco.

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Sara Castellanos

Se trata de Sigüenza, en Guadalajara, cuya distinción como Conjunto Histórico-Artístico no refleja del todo su extraordinario valor. La revista Viajar ha destacado su candidatura para integrar el Paisaje Dulce y Salado de Sigüenza-Atienza en la lista de Patrimonios Mundiales, ensalzando monumentos como el castillo medieval, actual Parador Nacional, y la majestuosa catedral diseñada por Alonso de Covarrubias, obra cumbre del renacimiento español.

Un legado medieval que cautiva a quien lo visita

Caminar por las calles de Sigüenza supone sumergirse en un entorno donde sobreviven tramos de muralla, casonas renacentistas y plazas barrocas. Elementos como la estatua funeraria de El Doncel, las capillas de San Pedro o de San Marcos, y el castillo que domina la ciudad, transportan al visitante a épocas de esplendor. No menos importantes son las jornadas medievales en honor a doña Blanca de Borbón, que cada año revitalizan el espíritu histórico de la localidad.

Además de su monumentalidad, el entorno natural añade un valor excepcional. Los ríos Dulce y Salado delimitan parajes como el Parque Natural del Río Dulce o la Microrreserva de los Saladares del Río Salado. La experiencia se completa gracias al Tren Medieval, que parte de Madrid y ofrece una inmersión cultural única entre trovadores y espectáculos. La combinación de patrimonio, cultura y naturaleza convierte a Sigüenza en un candidato ideal para obtener el reconocimiento mundial que merece.