El restaurante donde tienes que comer sí o sí en Burgos: un Estrella Michelin que estrena carta

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Uno de los grandes templos gastronómicos de Burgos ha sorprendido con una propuesta que apela tanto a la tradición como a la innovación. Sin revelar todos sus secretos a primera vista, este establecimiento con estrella Michelin ha lanzado una nueva oferta culinaria que promete conquistar a todos. Cada pase se convierte en un homenaje a la memoria gustativa y a la evolución constante de su autor.

Se trata de Ricardo Temiño Restaurante, donde el chef Ricardo Temiño y la sumiller y jefa de sala Cristina Lázaro incorporan dos nuevos menús degustación bajo el nombre de Camino y Camino Largo, con catorce y dieciocho elaboraciones respectivamente. Esta propuesta, disponible desde este 23 de abril, rinde tributo a la cocina burgalesa con platos emblemáticos como la trilogía de tapas por Burgos, la sopa castellana o el postre del abuelo, entrelazados con creaciones de temporada y referencias a la ruta jacobea.

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Sara Castellanos

Una experiencia que empieza en la bodega

El recorrido gastronómico arranca en la bodega del restaurante, donde se sirve el primer pase en una mesa renovada. A lo largo de la experiencia, los comensales atraviesan espacios como la cocina vista o el salón San Juan, decorado con vajilla artesanal y guiños personales como los hipopótamos favoritos del chef. Entre las propuestas, destacan el bogavante del Cantábrico en tartaleta, el bacalao madurado con callos y caviar o el postre de mango, curry, apio y lima, un viaje sensorial que culmina en dulce armonía.

Ubicado en la planta superior de un edificio histórico restaurado, el restaurante dispone de un salón con capacidad para veinte comensales, ampliable a seis más. La experiencia puede completarse con un maridaje cuidadosamente seleccionado por las responsables de bodega, por un precio adicional de 45 euros. Para disfrutar de esta propuesta —disponible de miércoles a sábado a mediodía, y viernes y sábado también por la noche— se requiere reserva previa. Una parada obligatoria para quienes buscan alta cocina con identidad local.