La comarca más desconocida de Navarra para conocer la esencia de una famosa trilogía literaria española

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Bosques envueltos en niebla, pueblos de caseríos de piedra y una atmósfera que parece sacada de un relato de misterio. Este rincón de Navarra, aún poco explorado por el turismo masivo, esconde algunos de los paisajes más evocadores del norte de España. Un destino ideal para los amantes de la naturaleza, la historia y la literatura que buscan sumergirse en un entorno lleno de mitos y leyendas.

El Valle del Baztán ha ganado popularidad en los últimos años gracias a la trilogía literaria de Dolores Redondo, un fenómeno editorial que ha llevado a muchos lectores a recorrer sus carreteras y senderos en busca de los escenarios descritos en El guardián invisible, Legado en los huesos y Ofrenda a la tormenta. Este valle, que se extiende a lo largo del río Bidasoa, reúne una combinación única de historia, tradiciones vascas y una naturaleza exuberante que ha inspirado tanto novelas como producciones cinematográficas.

Elizondo, capital del valle, es el epicentro de esta ruta literaria. Sus casonas señoriales, la iglesia de Santiago y el emblemático puente de Txokoto se han convertido en puntos de referencia para los seguidores de la saga. No te arrepentirás de hacer una parada en algunos de sus obradores para probar los famosos txantxigorris (tortas elaboradas a base de manteca de cerdo o chicharrón) o disfrutar de un masaje a la carta en el Hotel Balneario Elgorriaga. Pero más allá de su relación con la literatura, el Baztán ofrece un viaje en el tiempo a través de sus pueblos con encanto, como Arizkun o Erratzu, donde el pasado se percibe en cada calle empedrada y en cada palacio construido por los indianos que regresaron con fortuna de América.

Qué visitar en los alrededores

El misticismo de la comarca se refuerza con la presencia de Zugarramurdi, el pueblo de las brujas, cuya historia está marcada por los procesos inquisitoriales del siglo XVII. Las cuevas de Zugarramurdi, donde se dice que se celebraban aquelarres, son hoy un atractivo turístico que conecta con el imaginario ancestral de la zona. A pocos kilómetros, las cuevas de Urdax y la cascada de Xorroxin completan un itinerario en el que la naturaleza y la mitología se entrelazan en un escenario único.

El viaje por el Baztán no estaría completo sin una visita al Señorío de Bertiz, un parque natural que alberga uno de los jardines botánicos más espectaculares de Navarra. Con más de 2.000 hectáreas de bosques de hayas y robles centenarios, este enclave ofrece rutas de senderismo que permiten adentrarse en la esencia más pura del valle. Además, su palacio histórico y el mirador con vistas al río Bidasoa son paradas imprescindibles para quienes desean captar la belleza serena de este territorio.

El Valle del Baztán sigue siendo una joya oculta de Navarra, un destino donde el visitante puede descubrir la esencia de una tierra cargada de historia y misterio. Entre montañas cubiertas de niebla y senderos que parecen llevar a otro tiempo, esta comarca ofrece una experiencia inigualable para quienes buscan una conexión profunda con la cultura y el paisaje del norte.