Celebra el amor en Dubái: los planes más románticos para todo tipo de parejas

Dubái se ha convertido, en los últimos años, en un destino ideal para las parejas gracias a una oferta turística que abarca desde complejos hoteleros de lujo con todas las comodidades y playas de ensueño, hasta experiencias más activas, donde el desierto es el gran protagonista. Da igual que sean recién casados que quieran disfrutar de su luna de miel en una ciudad exótica, o aquellas que optan por celebrar sus bodas de plata con un viaje diferente, este emirato tiene planes para todos los gustos. Te los contamos.

Aventuras en el desierto

¿Hay algo más romántico que las vistas de un amanecer sobrevolando la ciudad en un globo aerostático? La empresa Balloon Adventures ofrece la posibilidad de descubrir la Reserva de Conservación del Desierto de Dubái desde el aire, una estampa difícil de olvidar que se completa con un recorrido por el desierto en un clásico Land Rover.

En medio del vasto paraje desértico, se encuentra un oasis de tranquilidad. Se trata del complejo hotelero de lujo Al Maha. En este paraíso las parejas podrán vislumbrar una cara distinta de Dubái a través de experiencias muy dispares, como bañarse en una piscina en medio de las dunas, observar el manto estrellado del cielo nocturno, ver un órix de Arabia o una gacela del desierto.

Si queréis un plan diferente en el desierto, os recomendamos realizar un safari nocturno con acampada. Platinum Heritage os invita a alojaros en un campamento beduino auténtico donde las parejas podrás resguardarse del frío de la noche junto al fuego en un Majlis, el lugar donde tradicionalmente se reúnen los árabes y que literalmente significa 'lugar para sentarse'.

Dubái también cuenta con una región montañesa llena de parajes al aire libre y lagos, Hatta, donde desconectar y pasar un rato increíble. Podréis recorrer esta zona en bicicleta o alquilar un kayak para navegar por las aguas azules del lago; también pasear a caballo, tiraros en tirolina o probar los toboganes acuáticos de Hatta Drop-in. Para dormir, Damani Lodges and Sedr Trailers ofrecen un ambiente sofisticado y al mismo tiempo mágico, en pleno contacto con la naturaleza. En Hatta Dome Park, por otro lado, podréis vivir una experiencia pura de glamping, ideal si sois más aventureros.

Resorts alejados del bullicio

Si lo que buscáis es alejaros de la multitud y encontrar vuestro remanso de paz particular, sin duda, la mejor opción es un resort. Anantara World Islands, en las Islas del Mundo de Dubái, es perfecto para disfrutar del entorno romántico y una escapada aislada, lejos del ruido y ajetreo de la ciudad.

Otra recomendación es One&Only The Palm, una lujosa propiedad, con vistas panorámicas al Golfo Arábigo y al cautivador horizonte de Dubái. Inspirado en la arquitectura de los palacios árabes y andaluces, este hotel cuenta con una amplia piscina con cabañas privadas.

Si preferís una experiencia completamente diferente y de un nivel superior, nuestra propuesta es Las Villas Malakiya de Madinat Jumeirah. Literalmente significan Villa Real y se trata de una joya oculta en la miniciudad de Madinat Jumeirah. Estas villas cuentan con piscina privada y una amplia terraza con increíbles vistas a los canales del complejo, además de un servicio de mayordomo.

Dónde comer

Si sois de los que os gusta el buen comer, Dubái ofrece experiencias gastronómicas en enclaves de ensueño que parecen sacadas de una película. Algo que será difícil que repitáis es cenar bajo el agua. En el Ristorante L’Olivo en Almahara, un acuario que va desde el suelo al techo es el gran protagonista, extendiéndose en forma de arco sobre las mesas. En esta experiencia submarina podréis degustar los platos estrella de la costa amalfitana mientras os perdéis en el movimiento de los peces que nadan a vuestro alrededor.

Fish Beach Taverna os transportará a un café de Santorini. Decorado en azul y blanco, este lugar mágico sirve comida del mar Egeo, tradicional de las costas de Grecia y Turquía. Siguiendo esa filosofía de compartir tan propia de la zona, el restaurante ofrece platos pequeños junto con pescado fresco del día que el chef podrá cocinar a vuestro gusto.

Y, como toda emoción es poca, necesitaréis finalizar el viaje cenando por las alturas, literalmente. At.mosphere es el restaurante más alto del mundo, a 442 metros de altura en el Burj Khalifa, un gran icono del centro de Dubái. Allí podréis disfrutar de algunas exquisiteces como foie gras, ostras y solomillo de wagyu al mismo tiempo que disfrutáis de las visitas de la ciudad.