La vida personal de Ana Garcés, más allá de 'La Promesa': su gran amor y su habilidad secreta

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La actriz Ana Garcés se ha convertido en uno de los rostros más reconocidos de la televisión gracias a su papel protagonista de Jana Expósito en La Promesa, la exitosa serie de La 1 de Televisión Española que ha cautivado a la audiencia con su ambientación de época en un palacete cordobés, y sus tramas llenas de giros inesperados.

Aunque la ficción ha sido clave en su ascenso profesional, su vida personal también ha despertado un gran interés entre los seguidores del serial. Desde sus inicios en Valladolid hasta su traslado a Madrid en busca de oportunidades, Garcés ha recorrido un camino lleno de esfuerzo y dedicación antes de alcanzar el éxito en la pequeña pantalla.

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A. Richart

Antes de dar vida a Jana Expósito, la actriz trabajó en distintas producciones, pero no siempre tuvo la estabilidad que ahora disfruta. Mientras asistía a castings, intentó compaginar su pasión con un empleo a media jornada en una tienda de ropa para poder mantenerse en la capital. Su perseverancia dio frutos cuando recibió la llamada que cambiaría su vida: el papel principal en La Promesa. Desde entonces, su popularidad no ha dejado de crecer y la audiencia la ha respaldado por su encarnación de una mujer determinada y con valores avanzados a la época que vive, de principios del siglo XX.

​Mucho más que Jana

La Promesa es su primer papel en televisión, pero la joven vallisoletana ha trabajado en diferentes obras de teatro, como El diluvio que viene, The Seagull (en inglés) y Friday. Entre sus habilidades menos conocidas, se atreve con el canto, y también toca la guitarra y el ukelele, como ha demostrado en alguna publicación en redes sociales.

Más allá de su carrera, nada se conoce de una posible pareja sentimental. En su cuenta oficial de Instagram, la intérprete publica anécdotas de su trabajo en la serie diaria, encuentros con sus compañeros de equipo, como Enrique Fortún, con quien le une una gran amistad, viajes y retratos de su querido gato.

El interés por la vida de Garcés sigue creciendo al mismo ritmo que la serie que la ha llevado al estrellato, que ya ha superado los dos años de emisión. Su naturalidad y talento la han convertido en una de las actrices más seguidas del momento, mientras La Promesa continúa consolidándose como un fenómeno televisivo.