"Preciosa": La miniserie española que está cautivando miradas en Movistar Plus+, con un plano secuencia de más de 40 minutos

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Ha llegado al límite de cerrar el 2024, pero una de las producciones más destacadas de este año en Movistar Plus+ ha conseguido captar la atención de críticos y espectadores gracias a su audaz propuesta narrativa y a un plano secuencia de más de cuarenta minutos que ha dejado boquiabiertos a los espectadores. Con una trama que explora los claroscuros del amor y el paso del tiempo, esta miniserie se ha convertido en un fenómeno en España y promete seguir dando de qué hablar.

Protagonizada por Iria del Río y Francesco Carril, la historia sigue a Ana y Óscar, una pareja que, a lo largo de una década, enfrenta los altibajos de una relación marcada por la pasión inicial, el desgaste inevitable y los intentos de reinvención. Cada episodio está ambientado en una Nochevieja, un recurso narrativo que ofrece una visión fragmentada, pero coherente de cómo evolucionan sus vidas.

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A. Richart

Ana cumple 30 años el día de Año Nuevo con la vida aún por resolver: vive en un piso compartido, no le gusta su trabajo y cambia a menudo de amigos. Óscar cumple 30 años el día de Nochevieja con la vida casi resuelta: médico vocacional, amigos fieles y una relación que va y viene. Justo cuando los dos llegan a la treintena se conocen, se enamoran y comienzan una relación que se alargará diez años.

El director Rodrigo Sorogoyen, conocido por su maestría en crear tensión y realismo en pantalla con obras como As bestas o Antidisturbios, filma esta producción junto a Sandra Romero y David Martín de los Santos. El director y co-creador (junto a Paula Fabra y Sara Cano) no solo se encarga de dirigir algunos de los episodios más memorables, sino que también aporta su sello inconfundible en el tratamiento visual y emocional de los conflictos que atraviesan los protagonistas, algo que ya sucedía en su ópera prima, Stockholm.

Una despedida prolongada en el tiempo

Uno de los elementos más comentados de la serie es el plano secuencia que protagoniza el quinto episodio. Durante más de cuarenta minutos, la cámara sigue a los personajes en una sola toma que despliega una tensión emocional apabullante, un logro técnico que ha sido aplaudido como uno de los momentos más destacados de la ficción española reciente. El recurso no solo es un alarde de dirección, sino que también refuerza la intensidad narrativa de la historia.

La serie no se limita a retratar las luces y sombras de una relación de pareja, sino que invita a reflexionar sobre el impacto del tiempo, las expectativas y las decisiones cotidianas en la vida. Ana y Óscar representan a una generación en la treintena que lucha por encontrar un equilibrio entre sus deseos personales y la convivencia en pareja.

La ya tildada de obra maestra lleva por título Los años nuevos, y desde el estreno de sus primeros cinco capítulos, el pasado noviembre, y los cinco últimos en diciembre, se ha consolidado como una de las series imprescindibles del año. Dirigida con pulso firme y protagonizada con autenticidad, es una cita obligada para quienes buscan historias que trasciendan la pantalla y resuenen en lo más profundo.