Así ha cambiado Joaquín Climent (Rómulo, en 'La Promesa'), desde sus inicios como "cara-pedo" en 'Farmacia de guardia'

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Joaquín Climent ha sido un rostro familiar en la televisión española durante más de tres décadas, y su evolución profesional ha sido tan variada como impactante. Desde sus primeros papeles en los años 80, pasando por su emblemática participación en series como Farmacia de guardia, hasta su más reciente aparición en La Promesa, el actor valenciano ha demostrado una capacidad de adaptación y versatilidad que lo ha consolidado como uno de los actores más respetados de su generación.

El actor, nacido en Requena en 1958, comenzó su carrera en el teatro, donde trabajó bajo la dirección de grandes nombres del panorama escénico español, como Miguel Narros. A finales de los años 80 y principios de los 90, Climent irrumpió en la televisión con personajes que dejaron huella, como el Ricardo Ventosera (mal nombrado "cara-pedo") en Farmacia de guardia. La serie, que se emitió entre 1991 y 1995, concedió a Climent un humorístico papel, al interpretar a un hombre de cierta ranciedad.

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Alejandra González

A lo largo de su carrera, el intérprete ha sabido diversificar sus papeles, transitando con éxito entre la comedia y el drama. Su carrera se consolidó desde los noventa hasta el nuevo milenio con trabajos destacados en series como El comisario y la miniserie La huella del crimen. En 1997 ya había aparecido en más de una treintena de episodios de Querido maestro, ficción protagonizada por Imanol Arias, que se emitió en Telecinco.

No era la primera vez que intervenía en una serie sobre el sistema educativo. Más tarde, en Física o química, su personaje de Adolfo Madrona, un jefe de estudios rígido y preocupado por el bienestar de sus alumnos, mostró la capacidad del actor para dotar de profundidad a los personajes más complejos.

Etapa en longevas series y cine

La habilidad de Climent para adaptarse a distintos géneros televisivos se mantuvo a lo largo de los años. En 2008, se sumó al elenco de Infidels en TV3, y más tarde, en 2010, donde su personaje Trino Muñoz, un hombre de principios, en Amar en tiempos revueltos, se convirtió en uno de los favoritos del público.

No obstante, su carrera no solo ha estado marcada por sus intervenciones en televisión, también ha dejado una huella importante en el cine y el teatro, participando en películas de renombre como Los lunes al sol (Fernando León de Aranoa), en 2002 y Cien años de perdón (Daniel Calparsoro), en 2016, y El bar (Álex de la Iglesia), en 2017, entre muchas otras producciones.

En los últimos años, su presencia en series de gran impacto como Venga Juan y Los favoritos de Midas en plataformas como Max y Netflix, respectivamente, han demostrado su capacidad para conectar con audiencias más jóvenes y adaptarse al cambiante panorama televisivo y digital. Además, su interpretación en Seis hermanas y Derecho a soñar ha confirmado que, incluso después de más de tres décadas de carrera, sigue siendo un actor fundamental en la ficción televisiva española.

Su participación en La Promesa, serie que se estrenó en 2023, marca un hito en su carrera al interpretar a Rómulo Baeza, un mayordomo cuyo perfil clásico y serio contrasta con los papeles más irreverentes y extravagantes que Climent había interpretado en su juventud. Con el paso del tiempo, el señor Baeza se ha ganado un hueco en el corazón de los llamados "promisers" (seguidores de la serie) y de los habitantes del popular palacete cordobés.