Max tiene la comedia perfecta para reírse (o preocuparse) después de las Elecciones de EEUU: se llevó todos los premios

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Justo después de unas elecciones tan intensas como las de EEUU, no hay mejor opción que una serie que permita reflexionar y, de paso, sacar una sonrisa en clave de sátira política. Si bien muchos dramas y thrillers han abordado la vida política norteamericana (desde El ala oeste de la Casa Blanca hasta The Politician), esta serie destaca por su enfoque humorístico y su perspectiva crítica hacia la maquinaria estadounidense.

La protagonista de esta historia es Julia Louis-Dreyfus, quien encarna a Selina Meyer, una caricaturizada vicepresidenta ambiciosa y sin muchos escrúpulos, que bien podría recordar a una figura como la de Donald Trump. Su objetivo, a toda costa, es hacerse con el puesto más alto en el gobierno de su país, y en su camino no duda en enfrentarse a situaciones incómodas e hilarantes.

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Ana Belén Ramos

Un elenco capaz de robar carcajadas acompaña a Louis-Dreyfus. El equipo de Selina Meyer está compuesto por personajes igual de cómicos y complejos, interpretados por un elenco de gran talento: Anna Chlumsky, Tony Hale, Reid Scott, Timothy Simons y Matt Walsh, entre otros. Cada uno aporta su toque único a este retrato de la política, desde el asesor leal, pero inepto, hasta el estratega frío que se enfrenta a problemas absurdos. Este grupo de secundarios, lejos de quedarse en segundo plano, logra captar la esencia de lo que ocurre "detrás de las bambalinas" en el juego político.

La sátira política, que se necesita ahora más que nunca, es una comedia creada por Armando Iannucci, en la que la propia Louis-Dreyfus ejerce como productora ejecutiva. La serie construye una sátira que aborda la vanidad, las estrategias cuestionables y la carrera por el poder que caracteriza a muchos líderes políticos. Para aquellos que disfrutan de la incomodidad y el humor de producciones como The Office, esta serie es una apuesta segura.

La verdad, desde la comedia

La narrativa de la serie avanza con episodios cortos y ágiles, perfectos para una maratón después de una jornada electoral llena de tensión. Desde sus inicios, la producción ha ganado fama por su humor ácido, que no teme explorar las debilidades humanas de sus personajes, y por su capacidad de hacer reír mientras plantea cuestiones relevantes.

No es de extrañar que, desde su estreno en 2012 y a lo largo de sus siete temporadas, haya acumulado un total de 17 premios Emmy (entre las que destaca mejor serie de comedia y mejor actriz protagonista en repetidas ocasiones) y 55 nominaciones, consolidándose como una de las comedias más premiadas de las últimas décadas.

Es una joya en los catálogos de Max y Movistar Plus+, que ha sabido sobrevivir a lo largo de los años y resurgir en el streaming con la misma fuerza de siempre. En estos tiempos de polarización, este título recuerda que la comedia también puede soltar unas cuantas verdades sobre la política. Veep es esa serie perfecta para aliviar la tensión (o preocuparse todavía más), tras las elecciones de EE.UU.