¿Por qué es tan adictivo "Cruel Summer", el thriller juvenil que triunfa en Amazon?

'Élite', 'Riverdale', 'Por 13 razones' o 'Pretty Little Liars' son algunas de las muchas series que inexplicablemente arrasan entre los jóvenes. 'Cruel Summer', el último drama adolescente estrenado con éxito por Amazon, es bastante más llevadera que algunas de estas populares glorias. Tira de topicazos, como todas, pero afortunadamente en mucha menor medida. Sin ser una obra maestra (no entrará en las listas de mejores series del año) y salvando alguna que otra estupidez de guion, cumple perfectamente con su función de entretener y punto.

La misteriosa historia en la que se ven envueltas sus dos protagonistas, y que transcurre en tres saltos temporales, es tremendamente adictiva. A ello ayudan, sin duda, los 'cliffhangers', que acompañan al final de sus distintos episodios, y un rompecabezas en toda regla que, como debe de ser, no se entiende hasta el último episodio.

Adictiva y sin grandes pretensiones, se ha convertido en una de las series del verano

'Cruel Summer' es una serie poco convencional que tiene lugar a lo largo de tres veranos en la década de los 90. Una hermosa y popular adolescente desaparece, y una chica, sin aparente relación con ella, pasa de ser una chica dulce y tímida a la más popular de la ciudad para finalmente convertirse en la persona más despreciada de Estados Unidos.

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¿Quién miente y quién no?

La serie, ambientada en 1993, 1994 y 1995, nos presenta a la típica niña monísima, Kate Wallis, interpretada maravillosamente por la actriz Olivia Holt, y a otra no tan guapa ni tan popular, un "patito feo" llamado Jeanette Turner (Chiara Aurelia), otro diamante en bruto de la interpretación. Esta pobre infeliz solo sueña con ser como ella, y que todos la miren. Por momentos lo consigue, sobre todo, cuando la primera desaparece misteriosamente sin dejar rastro.

Tras su regreso, Kate acusa a Jeanette de haber ocultado el lugar en el que estaba secuestrada y que, según ella, conocía perfectamente. La acusa de callarse con la finalidad de seguir disfrutando de su anhelada y nueva vida de ensueño. Ella, en cambio, lo niega.

¿Quién cuenta la verdad y quién miente? ¿Quién y por qué secuestró a la joven? Todo muy estúpido, aunque es imposible no sentir curiosidad y querer saber si Jeanette, a la que todo el país odia tras esas las graves acusaciones, tiene algo que ver o no en todo el tinglado.

Lo que hace interesante a 'Cruel Summer' también lo complica. Su narrativa, apoyada en continuos y frenéticos saltos temporales a lo largo de esos tres veranos, no da tregua. Hay que estar bien atento si uno no quiere perderse nada. Para ayudar al espectador a ubicarse, además de un distinto tratamiento de la imagen, la serie tira del atrezo de sus protagonistas, sobre todo, en el caso de Jeanette.

Kate y Jeanette son víctimas y esclavas de una sociedad perfeccionista

La protagonista pasa de llevar en su primer verano unos pelos intratablemente largos, un aparato de dientes y unas gafas de cuidado, a convertirse en un bellezón tan solo un verano después. En el tercer verano, acusada y señalada por todos, aparece con pelo corto y una cara de loca que no puede con ella. Es a partir del quinto cuando empieza a desenredarse el entuerto, hasta dar con la verdad en el sorprendente capítulo final.

'Cruel Summer' va mucho más allá que otros dramas adolescentes. Denuncia con acierto la presión que sufren muchos chavales por sus padres, que vuelcan en ellos demasiadas expectativas y amargas frustraciones. Sus hijos tienen que ser los mejores, los más guapos, los más inteligentes y, sobre todo, los más populares del instituto. Ambas protagonistas, Kate y Jeanette, son víctimas y esclavas de una sociedad perfeccionista, cuyos progenitores se encargan de fomentarla sin parar.

Por momentos, da la sensación de que conforme avance la temporada, la historia se va a volver más turbia y oscura, sin embargo, nada más lejos de la realidad. 'Cruel Summer', que ya ha sido renovada por una segunda temporada, es lista y hábil al no traspasar ningún límite, que impida ser vista por menores de edad. La violencia solo se insinúa y no hay escenas de sexo, a pesar de estar muy presente en toda la narración. En resumen, 'Cruel Summer' es un entretenido, efectista y cuidado 'thriller' juvenil, muy bien resuelto y que viene divinamente para hacer frente a esta recta final de agosto.