'En el corredor de la muerte' o las dudas que deja la historia de Pablo Ibar
La serie de Movistar+ adapta el libro de Nacho Carretero que cuenta la batalla judicial en EEUU de Pablo Ibar, el español que fue condenado a muerte por un triple homicidio
"Algunos pueden sentir que mi sentencia de cadena perpetua es como un acto de misericordia, pero no puede haber misericordia sin justicia. Una cadena perpetua todavía significa que voy a morir en prisión por un crimen que no cometí. Hay muchos detalles que no puedo explicar ahora, porque mi apelación sigue. Por favor, creedme cuando os digo que esto no se queda así. Voy a seguir luchando para demostrar mi inocencia". Con estas palabras se refería Pablo Ibar a la sentencia con la que, en mayo de 2019, esquivó la pena de muerte y fue condenado a cadena perpetua.
En aquella carta agradecía a su familia y a las instituciones españolas la ayuda que le brindaron para lograr aquella "victoria", pero remarcaba que esto no significaba un punto final en su lucha. Pablo Ibar cerraba así el capítulo del corredor de la muerte, ahora una serie de Bambú Producciones para Movistar+ se encarga de contar este episodio de su vida.
'En el corredor de la muerte' es la adaptación del libro homónimo de Nacho Carretero en el que el escritor y periodista gallego resumió sus años de investigación del caso Pablo Ibar y sus conversaciones con los protagonistas de la historia. "Intenté ser lo más aséptico y periodístico posible. La serie es un producto de ficción que está muy pegada a la realidad, pero como ficción, se puede permitir buscar un punto de vista concreto", nos decía Nacho Carretero sobre el libro y la nueva producción de Movistar+.
De la serie dice que "no puedo estar más satisfecho, y eso que es un tema extremadamente delicado". Y esto último creo que lo suscribimos todos los que nos hemos tenido que acercar a la historia de Pablo Ibar para contarla a través de los medios. Porque mientras empiezas a empatizar con la lucha del reo y su familia, te surgen dudas sobre su inocencia o culpabilidad, como también le surgirán al espectador que se acerque a 'En el corredor de la muerte'.
Pablo Ibar, una vida en tres actos
No me quiero extender mucho en la crónica de los hechos pues para eso está la serie (y el libro), aunque como resumen diré que Pablo Ibar ha pasado la mitad de su vida en la cárcel. Del primer acto de esta historia, el que no se cuenta entre barrotes, podemos decir que Pablo nació en Estados Unidos pero su origen está en el País Vasco. Su padre, Cándido Ibar, llegó en 1968 a Florida desde Zestoa (Guipúzcoa) para jugar de pelotari en el frontón de Dania Beach cuando la pelota vasca era un deporte que empezaba a ganar popularidad, como el apellido Ibar. El hermano mayor de Cándido, el tío de Pablo, era José Manuel Ibar, más conocido como Urtain, boxeador español que llegó a ser campeón de Europa de los pesos pesados, acabó arruinado y se suicidó cuatro días antes del inicio de las Olimpiadas de Barcelona 1992 acosado por las deudas.
El segundo acto de esta historia comienza en julio de 1994. Pablo Ibar es detenido como sospechoso de un triple asesinato junto a su amigo Seth Peñalver. En las cámaras de seguridad del lugar de los hechos se podía distinguir a una figura que podría ser el hispanoamericano. El vídeo, junto con la declaración de un vecino que dijo ver a dos jóvenes a través de un cristal tintado de un coche, es la única prueba que la fiscalía pudo presentar contra los acusados. A partir de ahí, y tras una investigación y proceso judicial plagado de errores y chapuzas, Pablo Ibar fue condenado a muerte en el año 2000. Ya llevaba seis años luchando por su inocencia antes de entrar en el corredor de la muerte, y los siguientes no serían muy distintos. En varias ocasiones, le negaron la repetición del juicio hasta que, en 2016, el Tribunal Supremo de Florida decretó que no había tenido un proceso justo y accedió a repetirlo, llegando así al tercer acto, el que está por escribir y que comienza con Pablo Ibar condenado a cadena perpetua en 2019.
¿Lo hizo o no lo hizo?
Esta es la pregunta que los espectadores se harán a la hora de acercarse a 'En el corredor de la muerte'. ¿Es Pablo Ibar culpable o inocente? Al igual que en el libro de Nacho Carretero, el cometido de la serie no es influir en el juicio del espectador, sino presentar los hechos para que este los interprete, al mismo tiempo que se cuenta la historia de Pablo y su familia. "Es como con Fariña (también del autor gallego). La serie permite al espectador acercarse y conocer un caso para reflexionar y sacar sus propias conclusiones y a partir de ahí profundizar más en el caso", dice Carretero.
"¿Qué herramientas tenemos para creer en la inocencia o culpabilidad de Pablo? Las pruebas. Y ni una sola demuestra claramente su culpabilidad"
Pero claro, detrás del producto, hay un autor. Y el autor tendrá su propia opinión sobre el caso. Ante esta pregunta, Nacho nos decía: "¿Qué herramientas tenemos o no para creer en la inocencia o culpabilidad de Pablo? Las pruebas. Y no hay ni una sola que pueda demostrar claramente la culpabilidad y, por tanto, con la estructura mental del sistema judicial que tenemos en Europa, sin pruebas que demuestren la culpabilidad, el acusado no puede permanecer en prisión. Más allá de las percepciones y creencias de cada uno".
"No conozco el mundo que se abre tras estas rejas. No sé lo que es entrar en internet, usar un teléfono móvil y conducir un coche nuevo. Mi concepción del mundo ha cambiado". Con estas palabras de Pablo Ibar comenzaba el libro en el que se basa la serie. Unas palabras que reflejan la que quizás sea la clave de esta historia: la privación de libertad sobre la presunción de inocencia. Y es esta pregunta la que nos solidariza con Pablo. ¿Y si es inocente? ¿Cómo se come que alguien haya pasado la mitad de su vida entre rejas de manera injusta?
Empatizar con Pablo Ibar: ¿una cuestión de fe?
Pablo Ibar nunca fue un modelo de conducta. Nunca lo negó. Cuando le detuvieron estaba trapicheando con drogas y se rodeaba de amistades poco recomendables. Pero su obstinada lucha por la inocencia llega a provocar empatía. Viendo 'En el corredor de la muerte' uno se mete poco a poco en el sufrimiento del personaje y en el de su familia. "Es sencillo generar un vínculo emocional por una cuestión de humanidad o empatía. Pero luego la gente se pregunta, ¿es culpable o es inocente? Como si eso pudiera tranquilizar esa sensación de empatía inicial o anularla. Y en ese debate yo siempre separo la empatía de creer si Pablo es inocente", responde Carretero a la pregunta de si es fácil empatizar con Pablo Ibar.
Miguel Ángel Silvestre recibió un sinfín de críticas cuando en 'El hormiguero' defendió la inocencia del preso
De esa identificación con el personaje tiene mucha culpa Miguel Ángel Silvestre, que da vida a Pablo Ibar en la pantalla. "Está impresionante. Es extraordinario lo que ha hecho, ha currado como una bestia. Desde que empezó el rodaje y hasta que terminó hablaba con acento cubano y nos dejó impresionados. Le va a venir muy bien profesionalmente", apunta el escritor.
Silvestre, que se ha mimetizado con Ibar de una manera magistral, es el máximo exponente de esa empatía de la que hablamos. En la promoción de la serie, el actor defendió la inocencia del preso en 'El Hormiguero', defensa que le valió un sinfín de críticas. Sobre esto Carretero opina que "a la gente que le critica y le pregunta que cómo puede decir eso si no sabe la verdad, yo digo que quién sabe la verdad…".
Pero no solo se mete uno en la lucha de Pablo en 'En el corredor de la muerte', la sensación de insistencia y sufrimiento de Tanya, su mujer, y su familia está muy conseguida en la serie. "Son una familia normal con la que es fácil sentirse identificado", dice Carretero. Pero ¿cómo habrán reaccionado ellos a la serie? "La familia sabe que todo lo que sea arrojar luz sobre el caso es beneficioso. Confían plenamente en mí en ese sentido. Nunca me embarcaría en un proyecto que considerase que fuera a ser perjudicial para ellos", apunta el escritor, a lo que añade, "más allá del debate de si Pablo lo hizo o no, hay una familia que está sufriendo y lo está pasando mal".
Una serie extremadamente delicada
Dice Nacho Carretero que "después de tantos años he generado un vínculo emocional con el caso. Cuando está todo bajo tu control (con el libro, por ejemplo) estás un poco más tranquilo, pero cuando ya se convierte en un proyecto mayor como es una serie de televisión, al principio, te atenaza el miedo de saber si será respetuosa con la situación y eso se me pasó el primer día en el que pude ver la sensibilidad y responsabilidad por parte de todo el equipo". Llevar un caso abierto a la pantalla es tremendamente delicado, y 'En el corredor de la muerte’ es consciente de ello, presentándose como una serie muy periodística con la que quizás algún espectador pueda sentirse frío por la falta de espectacularidad de un relato que no puede, ni debe, recurrir a los recursos dramáticos a los que estamos acostumbrados en televisión.
"La familia no tenía la cabeza en otra cosa que no fuera el juicio, pero siempre apoyó la serie"
Esa dificultad de llevar el caso de Pablo Ibar a la televisión ha contado también con un problema añadido: la grabación arrancó en paralelo al juicio en el que el reo fue condenado a cadena perpetua. Sobre esto, Carretero recuerda la complicación a la hora de recurrir a los protagonistas reales de la historia para hacer la serie: "La familia no tenía la cabeza en otra cosa que no fuera el juicio. La comunicación fue escasa porque estaban concentrados en un proceso delicadísimo, pero siempre nos apoyó y fue partidaria de la serie".
Bajo mi humilde punto de vista, 'En el corredor de la muerte' es muy respetuosa con el proceso que sigue abierto, con Pablo y su familia y con el espectador, al que no intenta convencer de nada. Otra cosa es que pueda enganchar a todo el que se acerque a la serie, y, como no me gusta ejercer de crítico, este ejercicio se lo he pedido a Nacho Carretero: "Como espectador, creo que es una serie de una calidad altísima, de una factura impecable, con un nivel de producción altísimo y que va a gustar mucho. No puedo estar más satisfecho del resultado. Todo el reparto está fantástico y el director, Carlos Marqués, ha tenido una sensibilidad que me ha dejado alucinado".
¿Es es un punto seguido?
Antes lo he llamado tercer acto, pero la realidad es que la lucha de Pablo Ibar y su familia continúa después de su condena a cadena perpetua. A sus 47 años, el hispanoamericano sigue con fuerzas para intentar demostrar su inocencia. Y en ese sentido, 'En el corredor de la muerte', la serie y el libro, es un capítulo de esta historia que tendrá una continuación en su día, ¿o no?
Ante esta pregunta, Nacho Carretero apunta que "es cuestión de plazos y estos van a ser muy largos. En el mejor de los casos, si se aceptara la repetición de juicio que la defensa ha presentado, estaríamos hablando de 4, 5 o 6 años. En ese sentido ni la productora ni yo nos planteamos seguir salvo que haya un evento que lo cambie todo a corto plazo. De momento, es un punto y seguido, pero habrá que esperar unos años y ver si podemos continuar". De momento, este acto, el que se cerró a mediados de 2019, podemos verlo en 'El corredor de la muerte'.
"Algunos pueden sentir que mi sentencia de cadena perpetua es como un acto de misericordia, pero no puede haber misericordia sin justicia. Una cadena perpetua todavía significa que voy a morir en prisión por un crimen que no cometí. Hay muchos detalles que no puedo explicar ahora, porque mi apelación sigue. Por favor, creedme cuando os digo que esto no se queda así. Voy a seguir luchando para demostrar mi inocencia". Con estas palabras se refería Pablo Ibar a la sentencia con la que, en mayo de 2019, esquivó la pena de muerte y fue condenado a cadena perpetua.