La razón por la que Petra Martínez (doña Fina) casi abandonó 'La que se avecina'

Entrar en una producción como 'La que se avecina' cuando su reparto es una verdadera piña no resulta fácil. Que se lo digan a Petra Martínez. La actriz jienense se incorporó a la exitosa ficción de Telecinco en su octava temporada, sin embargo, no todo fue un camino de rosas. La veterana actriz, de 74 años, a punto estuvo de abandonar la producción nada más arrancar.

"Me dio mucho miedo [la entrada], porque los actores llevaban ya muchísimo tiempo trabajando juntos. Tenían una comicidad que yo envidiaba", reconoció la actriz este domingo ante Emma García. "Me parecían todos maravillosos", de modo que su mayor preocupación pasaba por meter la pata y desencajar en una maquinaria tan bien engrasada.

Aunque si hubo algo que llamó poderosamente la atención fue la posibilidad real de que finalmente no estuviera en el reparto de la serie. "Cuando leí el primer texto, la primera secuencia, había muchos tacos y empecé a ensayar en mi casa: cabrones, hijos de puta, me cago en la leche....". Según la actriz, no llegó a percatarse de que "los gritos daban a la casa de al lado" y se escuchaban perfectamente desde fuera. Al día siguiente, incluso una vecina le preguntó si le ocurría algo, que la había notado "asustada".

"El primer año lo pasé muy mal"

Meterse en el papel de doña Fina no fue tarea sencilla para Petra Martínez, sobre todo, porque aterrizó en 'LQSA', concretamente como vecina del 2ºC, para convertirse en la gran pesadilla de todo Mirador de Montepinar. En su último trabajo, la actrizhabía formado parte del elenco de 'Gran Reserva' (La 1), ficción en la que interpretaba a Renata Ramos, esposa de Ricardo Reverte (Carlos Álvarez Novoa).

"Yo el primer año lo pasé muy mal", dijo tajante la actriz. "Hace cosa de unos cinco años me pusieron verde. No sabes lo que era aquello, Emmma, yo era una asquerosa", desveló ante la sorpresa del público. Y esos duros ataques tuvieron su efecto, tanto que llegó a plantearle a Alberto Caballero abandonar la ficción. "Me afectó [tanto] que le dije a Alberto que me iba. Me van a matar un día por la calle", llegó a temer. Aunque en el plató de 'Viva la vida' lo contó como una graciosa anécdota, Petra Martínez reconoció que pasó un verdadero calvario.

Afortunadamente, Alberto Caballero la animó a seguir y en tan solo unos meses la rabia y el desprecio que recibió el personaje se transformó en cariño y aprecio. "No sé qué tiene este personaje de doña Fina, pero los piropos que ahora me echan son estupendos. La gente me pide fotos y besos."