'The Crown' ficha a Gillian Anderson para interpretar a Margaret Tatcher

'The Crown' ya tiene a su Margaret Tatcher: Gillian Anderson se pondrá en la piel de la primera ministra de Reino Unido durante los años 1979 a 1990. La tercera temporada de la serie de Netflix aún no se ha estrenado, pero la cuarta entrega ya está en marcha con este fichaje.

Gillian Anderson se incorporará a la ficción creada por Peter Morgan en la próxima entrega, donde interpretará a la política, conocida como la "Dama de Hierro". Anderson es conocida por interpretar a la agente Scully en la serie 'Expediente X'. Su último éxito en la pequeña pantalla ha sido 'Sex Education' en Netflix.

['Mindhunter', 'The Crown', 'La casa de papel', los tronos y otros regresos de series en 2019]

'The Crown' regresará con la tercera temporada este año (aún sin fecha de estreno) situada en el año 1963, donde veremos acontecimientos como el nacimiento de los Beatles o el primer Mundial de fútbol que ganó Inglaterra en 1968.

Para estas nuevas entregas (Netflix confirmó una tercera y cuarta), no veremos a Claire Foy ni a Matt Smith como Isabel II y el príncipe Felipe. Serán los actores Olivia Colman ('Broadchurch) y Tobias Menzies ('Outlander') como los monarcas. También se unirán al reparto Helena Bonham Carter como la princesa Margarita, y Ben Daniels como Antony Armstrong-Jones, Lord Snowdon.

Así es 'Sex Education'

El último proyecto en el que hemos visto a Gillian Anderson antes de incorporarse al reparto de 'The Crown' es 'Sex Education', la serie adolescente de Netflix. 'Sex Education' es una divertida y desvergonzada perspectiva sobre la transición hacia la mayoría de edad llena de momentos buenos, rebeldes y a veces duros… pero que forman parte de la mejor etapa de la vida.

La serie cuenta la historia de Otis, un adolescente que vive con su madre Jean, una terapeuta sexual interpretada por Gillian Anderson ('Expediente X'). La serie de ocho episodios aborda conversaciones sobre sexo, identidad, amor y los altibajos de la transición a la vida adulta de una forma honesta y sincera, demostrando que "la experiencia no lo es todo".