Crítica de 'La catedral del mar', una cruda adaptación lastrada por su ambientación

'La catedral del mar' empezó este miércoles su construcción en Antena 3. La esperada adaptación del best seller de Ildefonso Falcones consigue trasladar a la pequeña pantalla una vibrante historia de superación, amor y bajas pasiones, pero falla en la ejecución en este primer episodio que EL CONFI TV ha tenido la ocasión de analizar antes de su emisión.

La nueva apuesta de Series Atresmedia superó en algo más de un millón de personas, y 3 puntos, a la gala de 'Supervivientes' que Telecinco programó este miércoles tras reubicar 'Factor X' en la noche del viernes. La serie reunió a 3.859.000 espectadores (22,8%) frente a los 2.849.000 (19,8%) que optaron por el reality de supervivencia.

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Adaptar una obra tan conocida y exitosa como 'La catedral del mar' supone todo un reto en sí mismo, ya que el espectador tiene una imagen mental tanto de personajes y tramas como de localizaciones, lo que puede volverse en contra. Es en estos dos aspectos donde hay que poner el foco en este primer episodio, ya que por la historia de la novela estaremos ante una serie bastante diferente a partir del tercer episodio (cuando se produce el relevo en el protagonismo, de Bernat a Arnau, de padre a hijo en la ficción, y con él una revolución dentro de la ficción).

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Un fiel reflejo de la novela

Este capítulo presenta de forma fiel el primer tramo de la novela, con la introducción del infierno que vive Arnau en su casa natal y cómo se ve obligado a huir, dejándolo todo atrás. Es este uno de los puntos donde mejor funciona el capítulo, en el buen traslado que se hace de la historia pese a su crudeza. Porque si por algo será recordado este episodio piloto, es por la dureza que transmite, recreándose en escenas que pueden herir sensibilidades pero muy necesarias para entender tanto las tramas como el contexto en el que se desarrolla la ficción.

Apostar por una adaptación más libre hubiera dado como resultado una presentación más orgánica

Esta adaptación casi literal de la obra lleva consigo también un nivel más pobre en cuanto a guiones, tramas y situaciones, con una historia que avanza a 'matacaballo' lastrada por el texto original. En este aspecto, quizá apostar por una adaptación más libre hubiera dado como resultado una presentación más orgánica. El lado positivo de ello, que la historia avanza rápidamente, sin espacio para el relleno en un primer capítulo muy entretenido.

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El apartado visual, talón de Aquiles

Una novela como 'La catedral del mar' requiere de una gran superproducción sobre la que construir su universo de personajes y es, precisamente, en una parte tan importante como esta donde más hace aguas. El primer tramo funciona mejor, al basar su acción en exteriores, siendo la segunda parte del metraje donde más se resiente al tratarse de interiores más pobremente construidos, ambientados e iluminados.

Ciertos vestidos, pelucas, mazmorras y cromas rechinan, ya que no lucen como pudieran y debieran en una producción de esta envergadura, evitando así que 'La catedral del mar' siga la estela de 'Isabel', en lo que a la cuestión estética se refiere.

El cambio de protagonista será clave para la serie y solo entonces podrá valorarse la serie en su conjunto. Por el momento son escasos los personajes y tramas presentados, por lo que ahora mismo aprueba gracias a la épica de su relato y la valentía a la hora de abordar la crudeza de la época.