Ana Mena regresó este miércoles, 8 de octubre, al plató de El hormigueropara hablar de su nueva etapa profesional y presentar Lárgate, el primer sencillo de lo que promete ser un nuevo capítulo musical en su carrera. Pero lo que comenzó como una entrevista distendida, marcada por el humor y la complicidad con Pablo Motos, terminó dejando uno de los momentos más comentados de la noche: la tajante negativa de la cantante a hablar de su nuevo tatuaje.
La artista malagueña acudió al programa de Antena 3 tras unos meses de descanso en los que, según confesó, necesitaba desconectar: “No sabéis cuánto lo necesitaba, me encontraba realmente agotada”, admitió, refiriéndose a su parón tras el éxito de Bellodrama y su gira internacional. Ahora, asegura sentirse “lista para renacer” y con muchas ganas de reconectar con su público en una etapa más madura y personal.
Durante la conversación, Mena habló de Lárgate —que sale este viernes— y de la película Ídolos, que protagoniza junto a su pareja, el actor Óscar Casas: “Es la primera película que se hace del mundial de MotoGP. Es una peli para toda la familia. Estamos grabando en circuitos reales, con coches reales, en carreras reales”, explicó. En la cinta, la cantante interpreta a una tatuadora, un detalle que dio pie a Pablo Motos a lanzar la pregunta que desató el momento más incómodo de la noche.
“Imagínate, yo sin tatuajes… tuvieron que ponerme muchos para el personaje”, decía Ana, cuando el presentador intervino con su característica curiosidad: “¿No tienes ningún tatuaje?”. La respuesta sorprendió a los espectadores: “Bueno, ahora tengo uno pequeñito”, reconoció la cantante, algo cohibida. Motos, rápido, quiso saber más: “¿Qué es? ¿Un nombre? ¿Una fecha? ¿Un dibujo?”. Pero Mena cortó de raíz la curiosidad del presentador con un rotundo: “No me tires de ahí”.
Ana Mena, en 'El hormiguero'. (Antena 3)
Lejos de rendirse, Pablo y las hormigas insistieron, tratando de arrancar alguna pista, pero la artista se mantuvo firme. “No”, respondió, una y otra vez, dejando claro que no iba a entrar en ese terreno. “No me tires de ahí”, repitió, incómoda, marcando los límites entre lo profesional y lo personal. Ante la negativa, Motos reformuló la pregunta: “¿Podríamos saber dónde?”, a lo que Ana, más relajada, accedió a dar una mínima pista: “Por aquí abajo”, dijo, señalando discretamente el bajo vientre.
El gesto de la cantante, entre la timidez y la complicidad, zanjó el tema entre risas y aplausos del público, pero dejó claro que hay aspectos de su vida que prefiere mantener en privado, pese a su creciente popularidad. Una reacción que muchos interpretaron como un ejemplo de naturalidad y de límites bien marcados: Ana Mena, que se abre en canal en sus canciones, sigue reservándose una parte solo para ella.
Ana Mena regresó este miércoles, 8 de octubre, al plató de El hormigueropara hablar de su nueva etapa profesional y presentar Lárgate, el primer sencillo de lo que promete ser un nuevo capítulo musical en su carrera. Pero lo que comenzó como una entrevista distendida, marcada por el humor y la complicidad con Pablo Motos, terminó dejando uno de los momentos más comentados de la noche: la tajante negativa de la cantante a hablar de su nuevo tatuaje.