El programa En boca de todos, de Cuatro, ha abordado este miércoles el calvario que viven Jesús y Rosa desde que decidieron alquilar su vivienda. Lo que comenzó como una situación temporal se ha convertido en una pesadilla que ha deteriorado gravemente su salud. A Jesús le dio un infarto y a Rosa le han diagnosticado un cáncer.
Este matrimonio octogenario confió y arrendó a una mujer con muchos problemas una vivienda en Dénia (Alicante). Sin embargo, pagó el alquiler de los dos primeros meses y desde entonces no ha pagado nada más, ni siquiera los recibos de la luz y del agua. "El alquiler era de 800 euros y se lo dejamos en 550 euros porque nos dijo que no podía pagar más. Le hicimos un contrato hasta el pasado 30 de abril y, cuando venció, dijo que no se iba". Según Jesús, la justicia no puede hacer nada porque se ampara en su supuesta vulnerabilidad.
Tras escuchar la dura historia de este matrimonio, el colaborador Carlos Segarra ha asegurado que estaban en esa difícil situación por "ser buenas personas y confiar infinitamente en la gente". No obstante, antes de seguir, ha afirmado que no estaban ante una okupa: "Esta mujer ha entrado con un contrato, con el permiso de sus propietarios, de modo que no es una okupa. Esta mujer es una inquilina morosa".
Carlos Segarra, colaborador de 'En boca de todos'. (Mediaset)
Jesús, el propietario de la vivienda, interrumpía al colaborador para recalcar que era "una inquiokupa", sin embargo, Segarra no compartía su opinión. El uso del término "inquiokupa" ha producido, en ese momento, un sonado desencuentro entre Nacho Abad y su colaborador.
"¡Inquiokupa sí o sí!", ha destacado sin contemplaciones Nacho Abad. El colaborador, lejos de rectificar, ha optado por encararse con el presentador. "Estoy en mi turno de palabra... ¿Porque es tu programa se queda como inquiokupa?".
Abad tampoco ha dado su brazo a torcer:"Inquiokupa, ¡y ya está! Estás en tu turno de palabra, pero es una inquiokupa. Y no... es nuestro programa, de todos nosotros. En mi opinión, es una inquiokupa. ¡Tú puedes decir lo que quieras!", le ha dicho el presentador de En boca de todos.
A continuación, el expolicía ha explicado, que el término inquiokupa no existe: "Es una palabra que no existe. Os lo habéis inventado los medios de comunicación para seguir subiendo ese alarmismo total que queréis instaurar en la población y no es verdad".
Nacho Abad, respondiendo a su colaborador. (Mediaset)
El término "inquiokupa" es cierto que no está incluido en el diccionario de la RAE, aunque sí aparece en consultas de la FundéuRAE, que señala que se refiere a una persona que se instala en una vivienda alquilada, paga las primeras cuotas, pero luego deja de pagar y ocupa la propiedad.
La intervención de Segarra ha encendido todavía más a Abad: "¿Te parece alarmismo el cáncer de Rosa y el infarto de Jesús, provocado por las tensiones de esta mujer por no pagar?". El colaborador, confundido, ha intentado nuevamente dar su opinión: "¡¿Eso qué tiene que ver?! Lo primero que he dicho es que esto les ha pasado por ser buenas personas y nada más. A mí no me indigna nada, pero sí me gusta llamar a las cosas por su nombre".
Después de este rifirrafe entre el presentador y el colaborador, ha sido Rosa, la propietaria, la que ha querido dejar clara su postura: "Yo tampoco acuño la palabra okupa, yo utilizo la palabra ¡ladrón! porque nos roban lo único que tenemos. Nos han quitado los ahorros de nuestra vida depositados en una casita. ¡No son okupas, son ladrones! Llamadlas como queráis".
Según Segarra, "una okupa es la que, con una patada en la puerta, se mete en una casa. Y no es vuestro caso. Vosotros, por ser buenas personas, dejasteis que una mujer arrendara vuestra vivienda, que además le bajasteis el precio, para que pudiera hacer el pago mensual. Ahora, es verdad, que el Estado os tiene que ayudar, pero os ayuda en la medida que puede".
"¡¿Cómo les ayuda hoy en día?!", ha querido saber el presentador. "Si me interrumpes cada dos por tres no puedo explicarlo. Ellos han presentado una demanda de desahucio y esa demanda, lamentablemente, tarda un tiempo en sustentarse, más del que quisiéramos. Os pediría que tuvierais calma. Ninguna empresa de 'desokupación' va a arreglar el problema que tenéis".
El programa En boca de todos, de Cuatro, ha abordado este miércoles el calvario que viven Jesús y Rosa desde que decidieron alquilar su vivienda. Lo que comenzó como una situación temporal se ha convertido en una pesadilla que ha deteriorado gravemente su salud. A Jesús le dio un infarto y a Rosa le han diagnosticado un cáncer.