Andreu Buenafuente regresa este jueves, 18 de septiembre, al prime time de La 1 con la segunda temporada de Futuro imperfecto, el programa que en su primera entrega ya se consolidó como la gran alternativa al todopoderoso Supervivientes de Telecinco. Con una media del 11,9% de share y más de 1,2 millones de espectadores, el show de humor inteligente producido por RTVE en colaboración con El Terrat (The Mediapro Studio) se convirtió en uno de los estrenos más refrescantes de la pasada temporada. Ahora, con la versión All Stars II del reality de Telecinco más debilitada que en años anteriores, Buenafuente tiene la oportunidad de dar la sorpresa.
Y para ello, el cómico ha introducido un importante cambio de cara a este segundo año de consolidación. Como el mismo ha desvelado en La Ventana de Carles Francino, una de las grandes novedades de esta segunda etapa es que las 12 entregas se grabarán el mismo jueves por la tarde, apenas unas horas antes de su emisión en prime time.
El cambio no es menor, cuyo objetivo es evitar desajustes con la actualidad, un problema que marcó puntualmente la primera temporada. Especialmente recordado fue el episodio en el que el programa se emitió el mismo día de la dimisión de Santos Cerdán, pero en cuyo monólogo inicial no se hacía referencia alguna, fruto de haber sido grabado días antes. Este hecho obligó al equipo a ironizar con un rótulo en pantalla para evitar cualquier tipo de suspicacia: “Programa grabado antes de la dimisión de Santos Cerdán. Rogamos a los políticos que respeten nuestro calendario de producción”. Con este nuevo sistema de grabación, Futuro Imperfecto gana frescura y se asegura de no quedar desfasado ante la avalancha informativa semanal.
El ácido rótulo de 'Futuro imperfecto'. (TVE)
Más voces cómicas y un programa en ruta
El regreso mantiene las señas de identidad del formato: el monólogo de Buenafuente, la “dosis semanal de dopamina” de Tamara García Romero, la música de Sergi Estella, la energía de Sílvia Abril, las investigaciones de Carles Tamayo y el humor de Raúl Cimas. Sin embargo, la segunda temporada apuesta fuerte por dos novedades de calado:
Por un lado, una rueda de cómicos invitados que se irán sumando puntualmente al programa para aportar nuevas voces y estilos de humor. Una forma de enriquecer el espacio con miradas diversas y ampliar el alcance de sus sátiras.
Por otro, un programa fuera de Terrassa: por primera vez desde su estreno, el show abandonará el plató habitual de LaFACT para grabar una entrega en otra ciudad, aun por determinar y desvelar.
La primera entrega, bajo el título Estamos de vuelta, ofrecerá un repaso al verano con temas como las protestas en La Vuelta ciclista, la retirada de España en Eurovisión o las interminables obras del Camp Nou. Raúl Cimas, David Martos y la propia Tamara García Romero acompañarán a Buenafuente en un arranque que servirá para medir fuerzas en una noche de jueves en la que La 1 vuelve a jugar en primera línea.
Con estos cambios estratégicos y la expectación generada, Futuro imperfecto afronta su segundo curso con el reto de consolidarse en la parrilla y, quién sabe, poner en aprietos al reality show de Telecinco ahora que muestra síntomas de desgaste. ¿Logrará Buenafuente y su equipo dar el campanazo y arrebatar el liderazgo de la noche a Jorge Javier? Sus armas no son menores, sobre todo al abordar desde el humor, y la reivindicación que caracteriza al catalán, las polémicas más candentes de la semana (Eurovisión y La Vuelta).
Andreu Buenafuente regresa este jueves, 18 de septiembre, al prime time de La 1 con la segunda temporada de Futuro imperfecto, el programa que en su primera entrega ya se consolidó como la gran alternativa al todopoderoso Supervivientes de Telecinco. Con una media del 11,9% de share y más de 1,2 millones de espectadores, el show de humor inteligente producido por RTVE en colaboración con El Terrat (The Mediapro Studio) se convirtió en uno de los estrenos más refrescantes de la pasada temporada. Ahora, con la versión All Stars II del reality de Telecinco más debilitada que en años anteriores, Buenafuente tiene la oportunidad de dar la sorpresa.