"Tranquilízate": Jorge Javier evita un bochorno y le para los pies a una invitada en 'El diario'

En El diario de Jorge puede ocurrir absolutamente de todo. Dos jóvenes han acudido para encontrar pareja y todo estaba preparado para que tuviesen una cita juntos. Sin embargo, a ella no le gustó él, sino el invitado del siguiente testimonio.

Rechazó en el acto al joven extremeño que fue buscando a una chica que tuviese un perro salchicha. No era su tipo. Tras abrir los teléfonos para que el público se interesase por alguno de los dos, el presentador se dispuso a abrir la siguiente historia de la tarde. Andrés, un negro musculoso colombiano, de 34 años, que causó sensación al pisar el plató.

La sonrisa nerviosa de la anterior invitada llamó la atención de Jorge Javier Vázquez: "Macarena, ¿puede ser que hayas dicho, 'este sí'?". Su risa y el rojo de su rostro respondió por ella. "Tú, primero, escucha su historia, y luego, ya...", le sugirió sutilmente, antes de entrar en harina en el caso que ocupaba al muchacho de Cali (Colombia).

Andrés se disponía a compartir con todos los telespectadores la razón por la que ha visitado el programa de Telecinco, cuando la chica volvía a interrumpir: "Tenemos algo en común, Jorge. ¡Yo me voy a ir a estudiar a Cali!". La emoción le duró poco, silenciada al instante: "A ver, Macarena. Tranquilízate. Be quiet, be quiet".

El también conductor de Supervivientes 2025 evitó una escena de total bochorno, ya que el participante latino fue a pedirle la mano a su actual pareja. Su situación fue complicándose conforme iba hablando: es padre de dos criaturas y su vida amorosa ha estado dentro de un trío de sentimientos al que ha puesto fin en televisión.

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N.C.

"Ahora que sé la historia, ya no me interesa...", atinó a decir Macarena, después de que Jorge Javier le preguntase si seguía dispuesta a conquistarlo. La cosa no acabó aquí. La chica tuvo que presenciar una pedida de mano ante sus ojos, previo semidesnudo de Andrés, para mostrarle el anillo que llevaba a modo de colgante. Su novia dijo que sí, mientras los cámaras enfocaban en primer plano la cara de la otra invitada, asombrada por todo lo que estaba sucediendo.