Felisuco contiene el llanto en 'Espejo público' al recibir un inesperado mensaje de Goyo Jiménez

Este viernes, 16 de mayo, la televisión dejó uno de esos momentos que trascienden el espectáculo. Félix Álvarez, Felisuco, acudía al plató de Espejo público para hablar de su presente sobre los escenarios y su pasado político. Lo que no esperaba era encontrarse con un mensaje que le tocaría la fibra más íntima: el que le dedicó su gran amigo y compañero de profesión, Goyo Jiménez.

El humorista interrumpió la entrevista a través de una emotiva grabación, donde dedicó unas palabras de admiración a Felisuco. Le definió como una persona generosa, divertida y trabajadora, alguien que pone el proyecto por delante de su propio ego y que hace brillar al grupo con su presencia. Goyo fue más allá y recordó la importancia de Felisuco en su vida, subrayando que ha estado presente en sus momentos más significativos, hasta el punto de ser protagonista directo de uno de ellos. Cerró su intervención con una declaración directa y sincera: “Te quiero mucho”.

El silencio invadió el plató. Felisuco, completamente emocionado, intentó contener las lágrimas. Con la voz quebrada y la emoción en el rostro, reconoció que Goyo es una de las pocas personas que no le ha fallado: “Es un gran amigo, una grandísima persona. Es el mejor monologuista de España. Si yo he estado en sus momentos complicados, él también ha estado en los míos. Al final, la vida te va dejando los que te deja, los que quedan, que son pocos. Todos tenemos, al final, un pequeño ramillete de amigos, pero él está ahí, en la parte más alta de ese ramillete”.

Felisuco también explicó a qué se refería Goyo cuando mencionaba que había “perpetrado” uno de los momentos más importantes de su vida: fue él quien ofició su boda. Desde entonces, la relación entre ambos se ha fortalecido aún más. “Ahora, casi todos los domingos cenamos juntos en un mexicano fantástico. Salgo del teatro, quedamos, nos contamos nuestras penas, nos reímos y seguimos para adelante”, contó, dejando ver la naturalidad con la que comparten la vida cotidiana.

Pero no todo fue emoción. También hubo espacio para la reflexión amarga sobre lo que significó su paso por la política. Felisuco confesó que su incursión como diputado por Ciudadanos le pasó factura en el terreno personal: “Me ha fallado mucha gente. Me he sentido marcado, estigmatizado, por hacer lo que yo creía que debía hacer, respetando siempre al resto de personas, aceptando las ideologías de todos. Pero sí, me he sentido fallado, marcado y estigmatizado. Pero bueno, son etapas, me quedo con todo lo bonito que viví, sobre todo siendo político en el Congreso de los Diputados”.

El momento dejó claro que, pese a todo, Felisuco se queda con lo esencial: los afectos que resisten. Y en ese pequeño ramillete que es la verdadera amistad, Goyo Jiménez ocupa un lugar privilegiado. Una escena sincera, conmovedora y muy humana que recordó que detrás del personaje y del político, sigue estando el hombre.